Los abogados de Marcela y Felipe Noble Herrera denunciaron públicamente una persecución policial que juzgaron “intimidatoria”. Apenas concluida la audiencia a la que los había convocado la jueza, las fuerzas policiales intentaron interceptar los automóviles donde viajaban los hermanos, “al tiempo que exhibían armas de grueso calibre”, señalaron los representantes legales que los acompañaban en los vehículos.
Una vez que Marcela y Felipe pudieron ingresar al domicilio de su madre, la empresaria periodística Ernestina Herrera de Noble, se enteraron de que la jueza había ordenado el allanamiento de sus domicilios y la requisa de sus efectos personales, ropa interior y prendas de vestir.
Según relataron los abogados, además la jueza “autorizó expresamente que ese procedimiento vejatorio tuviera lugar en la vía pública”. “Ya en la casa, los hermanos entregaron sus prendas de vestir en forma voluntaria”, añadieron. Los mismos profesionales agregaron que durante la audiencia, ambos expresaron personalmente su posición ante la Justicia y le pidieron a la jueza Arroyo Salgado que sean escuchados sus reclamos.




