Un hombre robusto, integrante del grupo que asesinó de un balazo al militante del Partido Obrero, Mariano Ferreyra y que ese día usaba un cuello ortopédico, fue detenido hoy por la policía, y se convirtió en el quinto apresado del caso.
El detenido, delegado gremial de la Unión Ferroviaria, fue identificado como Jorge González, el mismo que días atrás presentó un pedido de exención de prisión que le fue denegado por la jueza de instrucción Wilma López, quien dispuso su captura.
En tanto, el cuarto detenido por el crimen -que fue apresado ayer- Salvador Pipito se negó hoy a declarar ante la jueza quien le imputa amenazas al equipo televisivo del canal C5N para que dejara de filmar, en el momento en que el grupo que mató a Ferreyra comenzó la agresión.
Al declarar hoy mismo ante la jueza, González negó haber participado de las agresiones y de las amenazas a la periodista de ese canal de noticias Gabriela Carchak y alegó también no haber visto a quien efectuó los disparos.
Respecto de Cristian Favale, un barrabrava del ascenso al que se imputa ser el autor material del crimen de Ferreyra, dijo no conocerlo, según su abogado Carlos Forment.
González es de profesión radiólogo y trabaja hace seis años en el Roca y pese a que en las imágenes televisivas aparecen con un cuello ortopédico a raíz de una lesión que sufrió jugando al fútbol, al momento de los hechos estaba con licencia médica.
Al declarar hoy mismo en sede judicial se plegó a la versión de otros dos imputados, Pablo Díaz y Juan Carlos Pérez, de que otro integrante de la patota le advirtió que desde el sector donde estaban Ferreyra y otros dos heridos de bala, también se efectuaban disparos.
Sin embargo, en el expediente no existen hasta ahora constancias del hallazgo de balazos contra el sector del grupo agresor si no apenas de impactos de piedras y gomerazos que los agredidos usaron vanamente para defenderse.
En tanto, la fiscal Cristina Caamaño llegó hoy a los tribunales con custodia policial de dos hombres luego de que, según fuentes judiciales, advirtió "llamados y movimientos extraños en torno a su oficina“.
Si bien los primeros tres detenidos se declararon inocentes, Pérez habría incriminado a Favale como quien se jactó de "haber puesto al zurdo“ y a Díaz como la persona que lo convocó para que fuese al sitio donde se produjeron los incidentes.
Los hechos juzgados ocurrieron el miércoles 20 de octubre último cuando una patota de afiliados a la Unión Ferroviaria y barrabravas de fútbol mató de un balazo a Ferreyra e hirió a Elsa Rodríguez y Nelson Aguirre, quienes manifestaban junto a trabajadores que reclamaban empleo en blanco.
El Ministerio de Trabajo, a través de su jefe de gabinete, Norberto Ciaravino, informó hoy que el lunes se realizará una reunión con una decena de empresas ferroviarias que contratan personal tercerizado para que reincorporen a los cesantes.
Ya la semana pasada se había firmado una acta cuyo primer punto estableció la vuelta al trabajo y blanqueo de entre 70 y 100 trabajadores.
Télam




