Un nuevo y alarmante hecho de violencia volvió a empañar el desarrollo del fútbol liguista. Esta vez, el escenario fue el club El Cadi de San José del Rincón, donde este sábado debía disputarse el clásico frente a Atlético Arroyo Leyes por la 14ª fecha de la Primera B de la Liga Santafesina. Sin embargo, el partido de primera nunca comenzó: serios incidentes ocurridos tras la finalización de la reserva motivaron la suspensión del encuentro por falta de garantías.
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Según se supo, todo se desató cerca de las 15.30 cuando un joven, de 18 años, jugador de la reserva visitante, fue abordado por dos individuos (los que ya estarían debidamente identificados). Ambos habrían ingresado al club saltando un tapial desde la calle Puccinelli y Terraplén, y lo amenazaron de forma directa.
La víctima denunció que en medio de la agresión física cayó al suelo, perdió su billetera con $77.000 y su celular, y que uno de los atacantes intentó dispararle con una carabina, aunque el arma no llegó a accionar. Además, afirmó que varios cómplices merodeaban entre el terraplén y la cancha "buscándolo".
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Testigos complican más el cuadro
Uno de los allegados al equipo de Arroyo Leyes aportó un relato clave. Confirmó que al menos tres simpatizantes de El Cadi habrían interceptado a dos jugadores visitantes en el pasillo interno del club. "A uno le pusieron un arma en el pecho y a otro lo golpearon. Querían llevarlos afuera", declaró el testigo, quien también aseguró que los agresores tenían cuchillos y guiaban a los jugadores hacia la salida.
La situación derivó en un cierre inmediato del portón del club para proteger al resto del plantel visitante. Los jugadores permanecieron en el vestuario y finalmente se resolvió no jugar el partido de primera división, debido a la total ausencia de condiciones para garantizar la seguridad de los presentes.
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Este no es un hecho aislado. Hace apenas 15 días, el clásico de Santo Tomé entre Floresta y Don Salvador, correspondiente a la 12ª fecha, también fue suspendido luego de que un jugador agrediera físicamente al árbitro Leandro Zarza durante el partido de reserva. El juez fue golpeado desde atrás, atendido en el Samco local y luego radicó una denuncia penal.
"Este tipo de situaciones lamentablemente ocurren cada fin de semana", dijo en aquella oportunidad Zarza, visiblemente afectado.
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Investigación en curso
El episodio de este sábado en Rincón fue caratulado como "Amenazas calificadas", aunque hasta el momento no hubo aprehendidos ni secuestros. La policía continúa con la investigación para identificar con precisión a todos los implicados y verificar si efectivamente se utilizó un arma de fuego real.
Desde la Liga Santafesina ya tomaron conocimiento de lo ocurrido y se esperan medidas disciplinarias en las próximas horas.
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