El fin de semana extra largo dejó un tendal de críticas en Cipolletti luego de que se llevara a cabo una jineteada multitudinaria. Se especula que hubo más de 6 mil personas al momento del cierre, sin cumplimiento del protocolo COVID que se exige para este tipo de eventos masivos.
El sábado y domingo pasado tuvo lugar en el campo de jineteadas Andrés Retamal de Cipolletti un evento que es muy esperado por toda la comunidad campera. Se trató de la tercera fecha del campeonato de jinetada de Río Negro, etapa clasificatoria para el Festival de Jesús María del 2022 en la provincia de Córdoba.
El evento fue todo un éxito, pero llovieron las críticas por la gran cantidad de personas que concurrieron y la falta de cumplimientos de los protocolos que establece el municipio para cualquier actividad de estas características.
Desde temprano el predio ubicado en la zona de Cuatro Esquinas, a la vera de la Ruta Nacional 151, comenzó a recibir a los visitantes que llegaron desde varias ciudades de Río Negro y Neuquén, incluso en el lugar se podía acampar.
Fueron dos tardes llenas de jineteadas y carne asada, y un gran cierre con números musicales. Fue ese el momento donde se agolparon los presentes y comenzaron las críticas por la multitud.
Luego de las competiciones, donde se presentaron reconocidos jometes de toda la región e incluso de otras provincias, se organizó la “gran bailanta”. Al escenario principal subieron Los Charros de Cipolletti, Los Balseritos, y el gran cierre que estuvo a cargo de la cantante del momento: Sele Vera y Los Pampas.
El evento estuvo organizado por la Cooperativo de trabajo El 30 y el costo de la entrada para ambos días era de mil pesos.
En el predio, incluso, hubo presencia de altos funcionarios municipales. Pese a eso, en la denominada bailante, se registró un gran amontonamiento de personas donde la gran mayoría no cumplía ni con la distancia ni el uso de barbijos, protocolo que es de cumplimiento obligatorio para todos los eventos pese a ser al aire libre.