A 30 años de “lo espero en Segurola y
Habana, a ver si me dura 30 segundos”
Se cumplen 30 años de un partido que nadie olvidará. Fue la vuelta de Diego a Boca, en un partido contra Colón, cuando debió ser expulsado Caniggia y Toresani se peleó con Maradona.
Maradona y Toresani, el Pelusa y el Huevo, en el partido de la discordia.
Todo arrancó con ese foul tremendo y descalificador de Caniggia a Unali, cerquita de la tribuna que da a Casa Amarilla. Lamolina no hizo lo que debía hacer: echar a Caniggia. Hoy, con VAR, eso no debería haber pasado. La roja a Caniggia era tan evidente, que no haberlo echado fue un total acto de injusticia.
Toresani se desbordó. No le importó que era Boca, en su cancha llena y justo en la vuelta de Maradona tan deseada y esperada. Fiel a ese estilo frontal, impregnado de coraje, Toresani increpó a todos.
El Huevo no quiso ser “el pato de la boda”. No le importó que enfrente haya estado el jugador más importante e influyente que dio este país. No quiso ser el "pato de la boda". Amarilla para los dos y como el Huevo estaba amonestado, afuera.
"Maradona me hizo echar..."
"Me gustaría que Maradona me diga en la cara todo lo que dijo en la cancha. El me hizo echar. El manejó el partido", dijo Julio esa tarde. No tardó demasiado Maradona, en el otro vestuario, para enterarse de esas declaraciones. Y ahí surgió una de sus frases célebres: ""A Toresani: Segurola y Habana 4310, séptimo piso. Y vamos a ver si me dura 30 segundos".
Fue el 7 de octubre de 1995, hace 30 años. La Bombonera estaba “a reventar” y se enfrentaban el equipo de Bilardo contra aquel Colón de Enzo Trossero, que esa tarde juntó un gran partido pero no le alcanzó. Sobre el final, Scotto, con el rostro ensangrentado, fue autorizado para ingresar al campo de juego y marcó el gol en el arco del riachuelo. Boca terminó ganando un partido que debía ganar.
Era la vuelta de Maradona al fútbol después del doping del año anterior en el Mundial de Estados Unidos. Todo dado para que nadie pueda ignorar que Boca, a ese partido, lo debía ganar sí o sí.
La roja para Toresani, Maradona pegado al referí.
"Pensar que lo quise pelear, y hoy lo lloro. Después de aquella famosa discusión, él vino a jugar a Boca y fuimos grandes compañeros. Hablé muchas veces con él por teléfono. Yo pensé en traerlo como segundo mío. Lamentablemente, llegué tarde", escribió Diego en su Instagram cuando el Huevo fue encontrado sin vida el 22 de abril de 2019, cuando apenas tenía 51 años.
"No creí que fuese todo tan grave... Ahora, yo me pregunto, ¿por qué Boca, River o la A.F.A. no les dan apoyo a los futbolistas que pasan por esta situación? No creo que el caso de Toresani sea el único. Por otro lado, hay gente que conocía al Huevo mucho mejor que yo, y no hizo nada", siguió el mensaje.
"Él era un tipo muy trabajador. Lo lamento en el alma. Mi pésame a toda su familia. Ojalá que los hijos tengan el mismo corazón que su padre", cerró.
Una de las imágenes del aquel histórico partido.
Cuando Pancho reconoció su error
Cuando Pancho Lamolina, el árbitro de ese partido, estuvo en Santa Fe, dijo que “A Caniggia lo tendría que haber echado…! Esa misma noche me dí cuenta que me equivoqué, fue muy injusto porque el que se debió ir expulsado se quedó adentro y el que se tendría que haber quedado adentro, por Toresani, se fue de la cancha…"
"¡Y todo eso porque yo me equivoqué!... No me pareció violenta y cuando la ví en mi casa, me quería matar…”, dijo el árbitro de ese encuentro del que se cumplen 30 años.
Al partido lo ganó Boca, injustamente y con acciones “viciadas de legalidad”. Colón se fue de la cancha con bronca pero con la frente en alto. Se habló muchísimo de lo que pasó en ese partido. Cosas visibles y comprobables, más otras que forman parte de ese “libro interminables de versiones incomprobables” que tiene este bellísimo deporte que todos amamos.
Al partido lo tenía que ganar Boca. Y lo ganó con ayuda. Colón lo luchó con armas nobles y fue perjudicado. Volvía Maradona al fútbol argentino y a Boca, después de aquel paso fugaz por Newell’s para que llegue con algo de competencia al Mundial de 1994.
Las cosas que pasaron, adentro y afuera de la cancha, hicieron, de este partido, uno de esos que pasarán a la eternidad y nunca serán olvidados. Lo mismo que Maradona y Toresani.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.