Unión cayó esta noche en su visita a San Lorenzo por 4 a 2 y con este resultado se concretó su descenso a la B Nacional, la segunda división del fútbol argentino.
Las remotas chances de permanecer en Primera obligaban al conjunto de Sava a conseguir un triunfo. No servía otro resultado. Hasta poco antes del final el encuentro estaba 2 a 2, pero después de tanto ir, el local logró el desequilibrio para quedarse con los tres puntos.
Así, el rojiblanco pierde la categoría luego de dos temporadas en la máxima división, un descenso anunciado pero que hoy, con esta derrota, se consumó matemáticamente, poniendo fin a una agonía de varios meses.
Superado desde el inicio
El equipo local asumió el protagonismo desde el comienzo del partido y lo hizo con el acelerador a fondo. Eso, sumado a que Unión tardó en acomodarse, derivó en una rápida apertura del marcador, a los 2 minutos, cuando un pase profundo y por el medio encontró a Gonzalo Verón que corrió varios metros, superó claramente en velocidad al defensor y definió bien ante la salida de Limia.
El resultado parcial no modificó el trámite del partido, y la superioridad de San Lorenzo se mantuvo, y también las aproximaciones de riesgo. Así llegó el 2 a 0, a los 14’, cuando tras un tiro dentro del área la pelota rebotó en un defensor y le quedó a Verón (en posición adelantada), que sólo tuvo que empujarla para volver a marcar.
A pesar de la diferencia conseguida en poco tiempo de juego, el azulgrana justificaba la diferencia. Pero de a poco el Tate empezó a equiparar el juego en el mediocampo, y de ahí nació la jugada que terminó en el descuento. Iban 33’ cuando Juan Ignacio Cavallaro presionó y quitó la pelota, arrancó a pura velocidad y habilitó a Andrés Franzoia, que definió con un remate bajo, fuerte y cruzado al segundo palo para poner el 2 a 1.
Tras el descuento el equipo de Sava tomó envión y fue por más. No le quedaba otra. Y llegó a la igualdad: a los 42’ vino un centro desde un tiro libre (esta vez Galván estaba adelantado), el arquero local salió mal y tras un rebote apareció por el segundo palo otra vez Franzoia para conseguir un empate que, hasta los 20 minutos, parecía imposible, y que sacudió a los locales que parecían tener todo bajo control.
Y así como San Lorenzo pudo marcar el tercero cuando ganaba, en el final también Unión estuvo cerca de irse al descanso arriba en el marcador con una situación desperdiciada.
En el inicio de la segunda mitad apareció nuevamente la superioridad del “Santo”, y fue otra vez Verón el que remató al arco cuando Limia estaba vencido, pero una pierna salvadora despejó el balón sobre la línea. Iban apenas 2 minutos. Sesenta segundos después el arquero tapó un remate de Piatti que tenía destino de red. Dos situaciones muy claras que daban un indicio de lo que sería la segunda parte.
A los 5’ el que apareció por la derecha fue Buffarini, que encontró otra buena respuesta del guardameta rojiblanco. Y a los 9’ una mala salida del fondo de Unión terminó con un tiro apenas desviado de Kalinski.
Los dirigidos por Pizzi siguieron apretando y Limia se convirtió en una muralla que sostenía el resultado y la esperanza. Mientras, Unión se acomodó para jugar de contragolpe, y aunque sufría cada embate de San Lorenzo, no se resignaba y cuando podía aprovechaba los espacios que dejaba el local, que estaba decidido a quedarse con los tres puntos.
Con ese panorama, pasados los 20’ llegó por primera vez en el complemento el equipo santafesino: Lizio hizo una buena jugada sobre la izquierda, fue hasta el fondo y habilitó a Montero, cuyo remate fue tapado por un defensor. Fue lo más claro que tuvo Unión en los segundos 45 minutos.
A los 29’ el que se lo perdió Ángel Correa para el dueño de casa, en un mano a mano que definió cruzado y que se fue apenas desviado. Y a los 35’ fue Jara, que definió de taco pero otra vez Limia voló y contuvo una pelota que tenía destino de gol.
Pero la fortuna se terminó a los 42’, cuando desde fuera del área Alan Ruiz se perfiló y sacó un zurdazo preciso, que se metió por el segundo palo, imposible para el arquero. Un golazo para el 3 a 2.
Eso le bajó la persiana al encuentro y terminó por decretar el descenso de Unión, que ya totalmente descompensado vio como, en tiempo de descuento, Franco Jara “fusilaba” a Limia para establecer el 4 a 2 con el que finalizó el partido.
Punto final para la agonía de Unión. Se consumó un descenso anunciado tras dos temporadas y que tuvo en aquella decisiva racha de 26 partidos sin victorias (más de un año sin ganar de local) el detonante que lo puso donde hoy está. Queda para rescatar la actitud de los jugadores y, principalmente, de los hinchas, que en gran mayoría siempre fueron a alentar a pesar de la situación adversa. Ahora será volver a empezar para retornar lo antes posible a Primera.







