En lo que va de 2025, 21 personas murieron en accidentes de tránsito en el área metropolitana de Santa Fe. De ese total, 16 fallecieron dentro de la ciudad, una en La Guardia, una en Monte Vera, una en Colastiné y dos en Recreo.

La mayoría de los siniestros involucró a motos. Desde la ONG Factor Vial advierten sobre la necesidad de mayor educación y concientización. Y aseguran que las nuevas fotomultas a motovehículos o mayores controles no resuelven el problema de fondo.

En lo que va de 2025, 21 personas murieron en accidentes de tránsito en el área metropolitana de Santa Fe. De ese total, 16 fallecieron dentro de la ciudad, una en La Guardia, una en Monte Vera, una en Colastiné y dos en Recreo.
Los datos surgen del Observatorio Vial de la Agencia Provincial de Seguridad Vial, que recopila la información oficial de la Policía provincial y los va geolocalizando en un mapa. Por el momento son datos preliminares y, próximamente, el organismo dará a conocer los datos consolidados del 2024 en la provincia.
En la mayoría de esos siniestro hay motos involucradas. En 2023, el mismo Observatorio había revelado que el 70% de los motociclistas que murieron en siniestros viales no usaban casco, una tendencia que preocupa y que se repite en los registros actuales.

En este contexto, la Municipalidad de Santa Fe comenzó a implementar un sistema de fotomultas también a motos para controlar, entre otras infracciones, el uso del casco y el respeto de las normas de tránsito.
Sobre este tema y las principales causas de los siniestros, El Litoral consultó a Franco Romanello, referente de la ONG Factor Vial, que desarrolla campañas de educación y prevención en distintos espacios públicos y escuelas.
-¿Cuáles son las principales causas de los accidentes viales que observan desde la ONG?
-Vemos un incremento en los siniestros que involucran a usuarios de motocicletas. Aunque los informes son preliminares, más del 70% de los motociclistas fallecidos no usaba casco, y la mayoría tenía entre 15 y 34 años.
En el último mes y medio, el hospital Cullen atendió 40 siniestros viales y el 79% fueron motociclistas. Nosotros creemos que hay una multiplicidad de factores: el no uso del casco, la alta velocidad y el incumplimiento de las normas. Es un combo que se vuelve mortal, y lo estamos viendo con las cifras actuales.

-La Municipalidad anunció la implementación de fotomultas para motociclistas. ¿Puede ser una medida efectiva?
-Nosotros acompañamos todo lo que tenga que ver con el control, pero siempre aclaramos que no resuelve el problema de fondo. Acá se está hablando de vidas humanas, y hay mucha gente que, aunque reciba una multa, no logra comprender el valor de la vida.
Por eso insistimos en que debe existir un plan integral de educación vial, que involucre a todos: Estado, instituciones educativas, docentes, padres, jóvenes y medios de comunicación.
Lamentablemente, las cifras son alarmantes. Hace algunos años nos llamaban de las escuelas para dar charlas porque formaban parte de la currícula. Hoy nos convocan porque en las mismas comunidades educativas fallecieron docentes, alumnos o personal escolar. Eso demuestra hasta qué punto los siniestros alcanzaron todos los niveles sociales.

-Usted suele hablar de una "pandemia vial"...
-Es una pandemia vial, pero no porque haya un virus, sino porque hay un contagio de malas conductas y de malas prácticas entre los conductores. Los motociclistas encabezan las estadísticas, pero también vemos conductas peligrosas en automovilistas.
Lo preocupante es que ahora los siniestros más graves se dan en las avenidas principales -como Presidente Perón, Blas Parera, avenida Freyre, López y Planes, Aristóbulo del Valle, Gorriti-, que son justamente las más señalizadas. Antes, los accidentes graves se concentraban en los barrios; hoy ocurren en las grandes arterias, donde menos se respetan las normas.
-¿Influye la situación económica en el aumento del uso de motos en la ciudad, considerando el costo de transporte o de comprar un auto?
-Totalmente. Después de la pandemia se incrementaron primero los usuarios de bicicletas y luego los de motos. En tiempos de crisis, la moto se vuelve el vehículo más accesible: cuesta menos que un auto, tiene bajo mantenimiento y, ante un transporte público caro y que no logra afianzarse como sistema, muchos optan por ese medio.
El problema es que no se consideran los costos posteriores: el casco, el seguro, el mantenimiento. Y eso también influye en la siniestralidad. Aunque el 80% de los accidentes tiene causa humana, el restante 20% se relaciona con el mal estado o la falta de mantenimiento de los vehículos, algo que hoy también se ve afectado por la situación económica.
-¿Cómo evalúan desde la ONG el impacto de la ley de alcohol cero al volante?
-Nosotros siempre fuimos defensores absolutos del alcohol cero, porque incluso una mínima cantidad puede alterar las capacidades cognitivas. Pero lamentablemente, en los últimos tres meses se incrementaron los casos positivos de alcoholemia. Esto muestra que hay una falta de apego a las normas y a la vida misma.
No se trata sólo de aumentar las multas o endurecer sanciones: la gente sigue sin respetar las reglas. Hay que recuperar el respeto entre pares, entender que la movilidad es un bien común y que el tránsito seguro depende de todos. Hasta que eso no ocurra, seguiremos viendo las mismas cifras trágicas en nuestras calles.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.