Del coronavirus no se salva ningún deporte

La agonía de un turf con hipódromos cerrados

Gentileza Solitario y gris. Así se ve el hipódromo de Palermo desde que el coronavirus llegó al país, lo mismo ocurre con todos los escenarios del turf, una actividad que no quedó al margen de la pandemia que azota al planeta.Gentileza Solitario y gris. Así se ve el hipódromo de Palermo desde que el coronavirus llegó al país, lo mismo ocurre con todos los escenarios del turf, una actividad que no quedó al margen de la pandemia que azota al planeta.