La Fédération Française de Rugby anunció la creación de Nationale, una nueva división de rugby francés, que se deslizará entre Pro D2 y Federal 1 y será un trampolín para el rugby de elite, según expresa el comunicado oficial de presentación.


La Fédération Française de Rugby anunció la creación de Nationale, una nueva división de rugby francés, que se deslizará entre Pro D2 y Federal 1 y será un trampolín para el rugby de elite, según expresa el comunicado oficial de presentación.
En su edición primigenia, el certamen contará con la participación de catorce clubes en la temporada 020-2021; con la distribución de dos ascensos para el Pro D2.
La transición a este nuevo campeonato será fácil para los clubes que han acordado participar, ya que por el momento, “no habrá nuevas obligaciones: las reglas financieras, legales o administrativas serán las mismas para los clubes Nationale, que los que se conocían en la Federal 1. Sin embargo, este marco debería modificarse para la siguiente temporada (2021/2022)”, precisaron.
Este torneo se disputará con un formato idéntico al del poderoso Top 14 (la categoría superior gala), con desempates y etapas finales. Para pasar al siguiente nivel, deberá ser finalista, pero las subidas de un equipo de ProD2 solo se validarán si los finalistas cumplen con los criterios de las especificaciones de acceso. Si este no es el caso, no habrá ascenso (y por lo tanto no habrá descenso).
Los equipos que disputarán la primera edición del torneo serán Albi, Dax, RC Massy, Stade Niçois, USBPA Rugby, Stado Tarbes, UCS Rugby, RC Suresnes, Blagnac, Aubenas Vals, Narbonne, Bourgoin Stade Duonnais y Chambéry.
Críticas desde Oceanía
El director ejecutivo de la New Zealand Rugby Union, Mark Robinson, criticó a la Premiership de Inglaterra y a los clubes franceses del Top 14, por retrasar las conversaciones de un calendario global para la temporada mundial, durante la reunión virtual de World Rugby.
Tal como se informara, representantes de los principales países y torneos se reunieron el lunes pasado para discutir el futuro del juego a corto y largo plazo, incluidos los posibles ajustes al calendario internacional. El foro terminó en un punto muerto después de que representantes de los clubes ingleses y franceses dijeron que no aceptarían cambiar la ventana de julio en el sur a octubre.
Robinson criticó la falta de voluntad para el cambio de los dueños de los clubes ingleses y franceses, lo que una vez más ha pospuesto el objetivo de alinear los hemisferios. Dijo que la postura de los clubes era lamentable dado que la pandemia de coronavirus había creado una “oportunidad única que se da cada 100 años” para remodelar un calendario que tenía deficiencias inherentes.
* “Esperábamos que vengan a la reunión con un poco más de compromiso. Hay una gran alineación entre World Rugby, las Uuniones nacionales y los jugadores, para querer trabajar hacia algo nuevo. Tiene sentido comercial para jugadores y aficionados”, concluyó el neozelandés.
La oposición de los clubes no fue inesperada, ya que se sabía que los propietarios de los equipos franceses e ingleses estaban preocupados de que sus acuerdos de transmisión se redujeran si sufrían cambios. No están dispuestos a ceder en la negociación, como comenzar las temporadas de clubes en diciembre o incluso marzo, lo que convertiría el rugby profesional en un asunto de verano en el norte.