Argentino de Quilmes oficializó este viernes la llegada de Alexis Zárate para afrontar la próxima temporada de la Primera B Metropolitana. El defensor, de 31 años, retoma su carrera profesional cinco meses después de haber accedido a la libertad condicional en la causa por abuso sexual que lo llevó a prisión.
Formado en Independiente, Zárate tuvo pasos por Temperley y por el FK Liepaja de Letonia antes de regresar al país, cuando su condena quedó firme. Ahora, el club de la zona sur del Gran Buenos Aires apuesta por su experiencia en el marco de una reestructuración del plantel que busca dejar atrás la pelea por el descenso.
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El caso que lo llevó a la cárcel se remonta a marzo de 2014, cuando la Justicia lo encontró culpable de haber abusado de Giuliana Peralta mientras ella dormía. Fue condenado a seis años y medio de prisión y recién ingresó al penal en 2020, luego de agotar las instancias de apelación.
Según informaron fuentes judiciales, el exlateral de Independiente obtuvo la libertad condicional tras más de cinco años de encierro, en función de buena conducta, estudios realizados en prisión y trabajo externo. Sin embargo, seguirá sometido a pautas de conducta y a una restricción perimetral hasta 2027, cuando la pena quede completamente cumplida.
El desafío deportivo en la Primera B Metropolitana
La dirigencia de Argentino de Quilmes decidió incorporarlo en el marco de un recambio profundo del plantel, luego de una temporada en la que el equipo evitó el descenso por apenas cinco puntos. El objetivo es ganar solidez defensiva y pelear más arriba en la tabla en la campaña 2026.
En el Mate confían en que el recorrido de Zárate en Primera División y en el exterior pueda traducirse en jerarquía para una categoría siempre exigente. Al mismo tiempo, el club queda expuesto al debate que generan los regresos al deporte profesional de jugadores con condenas por violencia de género o delitos sexuales.
Un regreso que reabre discusiones en el fútbol argentino
El retorno de Zárate se suma a otros casos que, en los últimos años, encendieron discusiones sobre los límites entre la reinserción social y la responsabilidad de los clubes como instituciones formadoras. Mientras el futbolista busca reconstruir su carrera, organizaciones y movimientos feministas suelen cuestionar estos fichajes por el mensaje que pueden dar hacia la tribuna y la sociedad.
En lo estrictamente deportivo, Argentino de Quilmes ya proyecta la pretemporada con el defensor dentro del grupo. Deberá convivir con el doble desafío: recuperar ritmo competitivo y, al mismo tiempo, cumplir al detalle las condiciones que la Justicia fijó para su libertad condicional hasta 2027.