Ni bien terminado el partido, el ex vocal por la minoría en la actual comisión directiva, Miguel Carpinetti, se hizo presente en las cabinas donde estaban los jefes policiales del operativo para denunciar que el actual secretario Marcelo Maglianessi lo agredió físicamente después de una discusión que tuvieron cuando el 2-1 a favor de Tigre estaba consumado. A este incidente, que terminó en la comisaría subprimera del barrio Centenario, hay que agregarle varios ladrillazos que volaron del techo de algunas casitas del Fonavi que hicieron impacto en los micros de los muchos hinchas que Tigre trajo a Santa Fe.
A la comisaría
Una vez que el mismo Miguel Carpinetti _vestido con una chomba de color rojo_ hizo la denuncia en la cabina donde se ubican los jefes del operativo policial, fue custodiado hasta la subprimera para ratificar formalmente la agresión física. Casi al mismo tiempo, mientras Leo Astrada confirmaba que “no pensaba en bajar los brazos”, el integrante de la subcomisión de fútbol Osvaldo Pradolini daba su versión oficial de los hechos.
“Terminó el partido y empezó a gritar en la puerta del palco de los dirigentes contra el presidente, Astrada y los jugadores. Trataba a todos de ladrones. En ese momento, se acercó Fernando Maglianessi _hermano de Marcelo, secretario del club_ y lo trató de calmar, a lo que Carpinetti respondió tirándole una trompada. Allí se armó todo el revuelo”, dijo Pradolini. Cuando lo consultaron por la participación de Marcelo Maglianessi, Pradolini dijo “creo que estaba atrás”.
Por lo que pudo averiguar El Litoral, cuando Miguel Carpinetti _vocal renunciante por la minoría opositora_ estaba ratificando la denuncia en la seccional subprimera del barrio Centenario, se hizo presente el mismo Marcelo Maglianessi acompañado por el ex comisario Frioni que hoy es encargado de la seguridad en el Club Atlético Colón.
Cada uno describió su versión, por lo que ahora deberá actuar la Justicia. Incluso, Carpinetti llegó a solicitar la intervención del médico policial por entender que tenía uno de sus brazos fracturado por la agresión. Ahora, correrá el tiempo de los testigos y las diversas actuaciones.
Piedrazos en el Fonavi
Si algo realmente sorprendió en Santa Fe, más allá del habitual poder de convocatoria que tiene Colón en sus tribunas, fue el imponente número de simpatizantes que trajo Tigre desde Victoria al Cementerio de los Elefantes y que se ubicó en la cabecera sur, desplegando una gran cantidad de banderas con los colores del “Matador”.
Los cálculos policiales hablan de “entre 900 y 1.000 personas en el sector visitante”, las cuales festejaron ruidosamente la victoria en Santa Fe con diez jugadores. Por disposición policial, primero se desocupó la tribuna visitante y un cuarto de hora _en absoluta tranquilidad a pesar del resultado_ lo hizo la multitud sabalera.
Cuando los hinchas de Tigre iban a ocupar sus micros y coches para volverse a Victoria fueron impactados por algunos proyectiles que volaron desde la parte más alta de las casitas del Fonavi, aunque la rápida intervención policial hizo que la cosa no pasara a mayores.
De todos modos, hay pruebas fílmicas y fotográficas que poseen las autoridades policiales, donde se detecta claramente las “dos o tres” casitas del barrio San Gerónimo de donde partieron los proyectiles que hicieron impacto en algunos de los muchos hinchas que trajo Tigre a Santa Fe.




