Por Alberto Sánchez [email protected]
La gente no se equivoca. Antes de comenzar el partido, el pensamiento colectivo era: “Esta noche Unión tiene que ganar, Los Andes nos puede dar la oportunidad de lograr un triunfo para prendernos en la pelea”.
A veces la gente se equivoca. En el entretiempo, el comentario común era: “¿Cuántos goles meteremos esta noche? Los Andes no tiene nada y los delanteros de Unión están terribles”.
Las expresiones, los gestos, los rostros y las palabras de la gente tras el cotejo de anoche lo decían todo: “¡Ufff! ¡Qué manera de sufrir! ¡¿Será posible que siempre nos pase lo mismo?!
La gente no se equivoca: Unión hizo lo que tenía que hacer, ganó. Y la victoria lo puso al “tate” en una posición expectante.
La gente a veces se equivoca: Y además pierde la memoria, porque anoche a Unión le pasó en el segundo tiempo lo que casi siempre le pasa, no termina de “cerrar” los partidos y sus hinchas, injusta e innecesariamente, lo que terminan “cerrando” es otra cosa debido al sufrimiento provocado por el a la postre resultado “apretado”.
En conferencia de prensa pos partido, Fernando Quiroz señaló: “Estoy contento por el triunfo logrado, como así también por el nivel que mostró el equipo, principalmente en el primer tiempo, y además por cómo se la aguantó el equipo, en un momento difícil, después del segundo gol de Los Andes. Ahí tuvimos un bache de 10 minutos más o menos, entre los dos goles de ellos, donde no tuvimos la inteligencia o la aplicación necesaria para manejar la pelota y el partido”.
Continuando con el análisis, el director técnico explicó el porqué del bajón de la segunda etapa: “Los dejamos venir, como también dejamos que se agrande Britez Ojeda, que hizo un gran segundo tiempo. Así nos complicaron un poquito, pero fue más por lo que nos quedamos nosotros que por otra cosa, seguramente a eso hay que apuntar a corregir. Pero lo más difícil, que es crear situaciones de gol, atacar y convertir, lo hicimos. Pero recién empezamos y es lógico que nos falten algunas cosas, y que vayamos madurando para ser el equipo sólido que todos queremos”.
Equilibrio se busca
—¿A qué se debe la diferencia de rendimiento entre un tiempo y otro?
—Al exceso de confianza. Esto es fútbol y no te podés confiar porque te puede pasar lo que pasó, que en dos llegadas de ellos te compliqués. Otro tema no hay, porque después del segundo gol de Los Andes el equipo reaccionó, tal es así que convertimos otro gol legítimo de Guerra y que el árbitro cobró off side que al final no era. Con ese gol definíamos el partido, pero no nos tiene que pasar más porque no siempre se saca una diferencia de tres goles, porque si la diferencia es de sólo un gol no te desconcentrás tanto.
—¿Es mayor la satisfacción por lo hecho en el primer tiempo que la preocupación por el rendimiento del segundo?
—Los entrenadores siempre tenemos preocupaciones, porque siempre nos queda algo por corregir. Hoy a nosotros nos quedó ese bache de 10 o 15 minutos que lo pagamos caro porque recibimos dos goles. Pero también pienso que lo que hizo el equipo en el primer tiempo fue de lo mejor que hicimos en el torneo, así que también me queda esa sensación de que hay un equipo que potencialmente puede dar lo que uno piensa. O sea, uno espera lo que hizo Unión en el primer tiempo, es como que uno busca eso, y se logró. Ahora hay que tratar de mantenerlo principalmente en lo mental, más allá del resultado que tenga el partido durante 70 u 80 minutos.
—Luego de cinco fechas, ¿A cuánto está Unión de lo que pretendés?
—Si mantenemos lo hecho en el primer tiempo estamos muy cerca de lo que pretendo, tenemos que lograr ese equilibrio, pero es lógico que nos pase lo de hoy (por anoche). El torneo recién empieza, pero creo que fuimos de menor a mayor. No hicimos un buen partido con Belgrano, aunque no merecimos perder. Con Talleres sí merecimos ganar porque jugamos bien. Instituto, que me parece es el mejor rival que enfrentamos, nos jugó de igual a igual y atacamos parejos. Pero en estos dos últimos partidos marcamos una diferencia muy notoria en el juego con los rivales. Por eso digo que estamos creciendo como equipo, pero falta regular un poco lo que pasó hoy en el segundo tiempo.
Para terminar, “Teté” caracterizó la performance de sus dirigidos en los primeros 45 minutos: “Fuimos verticales, punzantes y contundentes, que es lo que terminó marcando la diferencia entre un equipo y otro, Y además estuvimos bien parados y ordenados, sin desesperarnos, aún en los primeros minutos, en los cuales Los Andes se nos vino encima, pero nosotros estuvimos tranquilos, nunca perdimos el orden. Como entrenador, tener un primer tiempo así es muy satisfactorio, después queda lo otro para corregir.




