Evite los cambios bruscos de temperatura.
Mantenga la higiene de sus manos y ayude a sus hijos a adquirir este importante hábito.
Ventile los ambientes y permita que ingrese el sol.
No fume en espacios cerrados.
Evite el contacto cercano con personas con tos y secreciones nasales.
Al toser no se cubra con las manos, sino con los puños, las mangas o un pañuelo.
No comparta toallas, pañuelos u otros objetos personales que faciliten el contagio.
Mantenga una rutina de limpieza y desinfección del hogar.
Si tiene síntomas, evite concurrir al trabajo, escuela, etcétera.
Consuma frutas y verduras.
Amamante a los bebés: la leche materna exclusiva hasta los seis meses y complementaria hasta los dos años es una medida preventiva muy importante.
Evite, si es posible, los lugares con mucha gente.




