Las hermanas Williams, Venus y Serena, disputarán el sábado en Wimbledon su octava final del Grand Slam entre ambas, la cuarta en el césped londinense, lo que prueba su hegemonía en el All England Club y su papel protagonista en el circuito de la WTA.
Venus, de 29 años, suma ya cinco títulos en Wimbledon y tratará de repetir su éxito de 2008 ante su hermana Serena, de 28 años y dos veces campeona en el torneo.
Desde la victoria de la pequeña en el Abierto de Estados Unidos de 1999, las dos hermanas han conquistado casi la mitad de los 39 torneos del Grand Slam disputados (diez para Serena, siete para Venus).
Una estadística impresionante, teniendo en cuenta que en tierra batida no son especialistas y sólo Serena ha logrado imponerse en Roland Garros.
En las diez últimas finales de Wimbledon, únicamente en 2006 no hubo presencia familiar. Juntas han sumado siete de los nueve últimos títulos (2002 y 2003 para Serena, 2000, 2001, 2005, 2007 y 2008 para Venus).
Sólo la rusa Maria Sharapova y la francesa Amélie Mauresmo han conseguido inscribir su nombre en el palmarés en lo que va de siglo. La primera está en fase de recuperación de una lesión y la segunda parece estar ya en la parte final de su carrera, sin opciones de volver al primer nivel.
En principio, Venus será ligeramente favorita, sobre todo después de los apuros vividos por Serena ante la rusa Elena Dementieva en semifinales, donde estuvo a punto de perder e incluso tuvo que levantar una bola de partido en contra.
Por su parte, en su duelo del jueves, la mayor de las Williams protagonizó una auténtica exhibición ante la número uno del mundo, la también rusa Dinara Safina, a la que superó en 51 minutos por un elocuente 6-1 y 6-0.
Los seis encuentros que han conducido a Venus a la final han servido para dejar clara su solidez y desde el inicio del torneo sólo ha perdido tres juegos de media por partido.
Puede que Serena sea una jugadora más completa por su capacidad para ganar títulos en todas las superficies, pero su hermana es la gran dominadora en Londres.
En sus enfrentamientos directos en finales de primer nivel, la pequeña, actual número dos de la lista de la WTA, ha salida victoriosa en cinco de ellas.
En caso de sumar el ansiado sexto título en Wimbledon, Venus alcanzaría en el palmarés a la mítica Billie Jean King, al que admira y tiene como referente por su brillante carrera.
AFP




