"San Lorenzo está peligroso'' fue la frase más escuchada por El Litoral en la recorrida realizada esta mañana, en la que los vecinos también refirieron sentirse con miedo e inseguros.
El barrio se localiza al suroeste de la ciudad y está delimitado por las calles General López al norte, Jujuy al sur, Dr. Zavalla al este y el límite de la ciudad al oeste. Muchas son las familias que lo habitan y muchas, también, las que quisieran irse de él.
"Esta zona cada vez está peor. No tenemos seguridad de ningún tipo y estamos inundados de droga. ¿Cómo no voy a querer irme?'', manifestó un vecino que vive desde hace varios años en el lugar y solicitó, para pasar desapercibido, no ser fotografiado.
Los vecinos más antiguos de San Lorenzo son los que más notan los cambios. Y al ser consultados sobre ello, enumeraron las diferencias que observan con la actualidad: "Antes se podía salir o llegar a cualquier hora que no pasaba nada, todos nos conocíamos con todos y existía un respeto mutuo entre los habitantes'', mencionaron.
"Vivo acá desde hace 55 años y noto una diferencia abismal entre lo que era por entonces San Lorenzo y lo que es hoy'', señaló Carlos, citando como ejemplo que "ahora ya no se puede salir más de noche porque es peligroso''.
Ricardo, por su parte, es verdulero desde hace 46 años. Lleva tres asaltos en su haber y se mostró preocupado por la problemática de la inseguridad porque "hay poca vigilancia y mucha delincuencia''. En su recuerdo, también está el "viejo barrio'' San Lorenzo. "Antes, el barrio era una cosa hermosa. Tal vez no teníamos asfalto u otros servicios pero vivíamos mejor. Vos podías salir de tu casa y volver a cualquier hora que no te iba a pasar nada'', remarcó.
Pero él no fue el único que sufrió un asalto. Rubén, otro comerciante, también lo padeció y en un número mayor: siete veces. Sin embargo, sigue atendiendo su negocio a puertas abiertas porque considera que es un problema generalizado en toda la ciudad.
Por una minoría
El sector oeste del barrio es el más afectado por la inseguridad. Y una vecina, que por temor no quiso ser fotografiada ni dar su nombre, contó que vivir allí se ha tornado muy peligroso por un grupo de quince jóvenes, que bajo el efecto de drogas, ocasiona los hechos de violencia.
En sus palabras, "en San Lorenzo ya no se puede estar más'', pese a que vive cerca de una dependencia policial. "Hace treinta años que habito acá y si pudiera irme me iría'', dijo.
Lo que más les llama la atención a los vecinos es que son cada vez más de menor edad los que roban y asaltan, sobre todo a mujeres y niños que se trasladan en bicicletas. Asimismo, señalaron que aunque es un grupo minoritario el que ocasiona los hechos, la inseguridad preocupa sobremanera en el lugar y debe ser el Estado el que les brinde una solución, a través de diferentes políticas de inclusión, para poder lograr lo que más desean: vivir tranquilos.
De la Redacción de El Litoral







