Los guardiacárceles reclamaron “la prevención de los daños en los penales, por ser ésta la directriz dentro de la política de seguridad en una unidad penitenciaria”.
Advirtieron que “la situación de trabajo en este momento dentro de los penales nos pone en peligro no sólo a los empleados, sino a los internos, porque no se garantiza un lugar seguro para nadie”.




