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El Senado nacional aprobó anoche por unanimidad, un pedido de informes sobre las investigaciones que lleva adelante el gobierno para determinar el origen de las interferencias que en los últimos tres días afectaron a las señales de Canal 13, radio Mitre, FM 100 y varias señales de cable Artear (grupo Clarín).
El proyecto lleva las firmas de 23 senadores de la oposición, y sostiene que “se ha producido un hecho de gravedad extrema y sin precedente”, que “constituyó un obstáculo en el acceso a la información de habitantes de nuestro país y la difusión de esas señales a otros países del mundo”.
La iniciativa fue propuesta por el secretario de la Comisión de Medios de Comunicación, el radical Juan Carlos Marino, y acompañada por once integrantes del bloque, incluidos Gerardo Morales y Ernesto Sanz, el socialista Rubén Giustiniani, María Eugenia Estenssoro, los justicialistas disidentes Carlos Reutemann, Roxana Latorre, Adolfo Rodríguez Saá, Juan Carlos Romero e Hilda Chiche Duhalde, entre otros.
Artear había informado ayer que “en las últimas 48 horas” había sufrido interferencias que impidieron la recepción de sus señales televisivas y radiales, entre otras, de TN, Canal 13, Radio Mitre y FM 100, además de otras señales para cable, que van vía satélite al interior y exterior del país.
En ese marco, los operadores del satélite Intelsat dijeron que habían detectado “una fuerte interferencia” en el transpondedor que utiliza Artear y que esas señales fueron las únicas afectadas.
En la tarde de ayer el fenómeno se reprodujo y fue denunciado por los presentadores de noticias de la señal de cable del grupo. “TN comunica a sus televidentes que su transmisión está siendo interferida por acciones ajenas a este canal y por motivos que se investigan”, dijeron.
Libertad de expresión
“Queremos saber, por parte del Comfer, por parte de la Comisión Nacional de Comunicaciones, qué es lo que está ocurriendo en la Argentina, porque una democracia sin libertad de expresión es una democracia renga”, dijo Marino en declaraciones a TN.
Marino, quien es vicepresidente de la Comisión de Comunicación de la Cámara Alta, advirtió que lo ocurrido con Artear “es un hecho más de lo que venimos viviendo desde hace mucho tiempo con diferentes radios, canales y periodistas independientes”.
Explicó que lo ocurrido en las señales del grupo Clarín “viene pasando en la Argentina: el que habla bien del gobierno no sólo tiene una abultada pauta oficial, sino que, además, son sus medios de comunicación preferidos”.
Pero, sostuvo, “aquellos medios que reflejen la realidad, tienen este tipo de problemas”. Finalmente, Marino se refirió al proyecto de ley de radiodifusión del gobierno y al respecto dijo que es “grave que se envíe en este momento, porque no es por una política de Estado sino por la pelea del gobierno con algunos medios por reflejar la realidad”.
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Por tercer día consecutivo, las señales de Artear -incluso radio Mitre, varias FM y señales de cable- sufrieron interferencias en sus emisiones. No hay precisiones sobre su origen.
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