Mis ejes van a estar puestos en dos cuestiones: trabajo y participación. Una de las principales razones para que se produzcan luego otras cuestiones es la necesidad laboral. Vivimos en una de las ciudades que menos trabajo tiene y, a su vez, donde hay más inseguridad porque es una consecuencia directa. Entonces aunque planteen que se bajan índices, hay un problema de fondo que nadie lo toca. Por otro lado, es fundamental democratizar, lograr la participación de los vecinos y que se comprometan. El presupuesto participativo se está aplicando mal porque hacen elegir a la gente entre proyectos que ya vienen bajados por el municipio. Tenemos que lograr que la gente se sienta dueña y parte de cada decisión.




