La Unidad de Renegociación de Contratos (Uniren) está a cargo de la renegociación del contrato con la concesionaria del servicio de dragado y balizamiento de la hidrovía. Y el dragado de la hidrovía sur y norte está condicionado a los resultados de las negociaciones en ese ámbito.
En la renegociación están en juego varios temas importantes, como una millonaria deuda del Estado con Hidrovía por el no pago de un subsidio anual de 40 millones de dólares, acordado por contrato, que no se abona desde el gobierno de Fernando de la Rúa. Y también el margen del incremento del peaje.




