Esta mañana se oficializará la relocalización del restaurado mural "Lex Legum", del maestro del arte santafesino César López Claro. La actividad tendrá lugar en el Colegio Nuestra Señora de Guadalupe, donde además se presentará el proyecto "La Valija del Pintor".
El lienzo fue sometido a un intenso y profundo trabajo de restauración desarrollado por un equipo de profesionales convocados por la Secretaría de Cultura de la Municipalidad. El acto tendrá lugar en el Colegio Nuestra Señora de Guadalupe y será encabezado por el intendente Mario Barletta.
La obra pertenece se titula ‘Lex legum‘(Ley de leyes, en latín). Se trata de un paño de 5,00 x 4,00 metros, y al momento de su creación -en el año 1994- fue destinado al recinto del Paraninfo de la Universidad Nacional del Litoral, donde sesionó la Asamblea Nacional Constituyente reformadora de la Carta Magna de nuestra Nación.
La valija del pintor
Además, se presentará el Proyecto "La Valija del Pintor", propuesta desarrollada por la Secretaría de Cultura santafesina. Participa de la propuesta cultural María Brizzi de López Claro y los integrantes de la Asociación de Amigos del Museo.
Este proyecto propone acercar la obra del prestigioso artista plástico César López Claro a los niños. La Valija guarda reproducciones de la obra de López Claro y materiales para que los alumnos jueguen y aprendan de la mano del arte.
Sobre el mural
‘Lex Legum‘ fue pintado en 1994 por el reconocido artista local. El tiempo favoreció su lento deterioro y presentaba ondulaciones, rajaduras, manchas de humedad y ácaros. Estos elementos conforman un cuadro general de ‘serios problemas de conservación‘, según precisaron en su oportunidad las autoridades municipales que determinaron la necesidad de su restauración.
Hace más de un año que habían iniciado las tareas de recuperación de la valiosa obra. En ese entonces, la subsecretaria de Diversidad y Proyección Cultural, Isabel Molinas señalaba que la obra ‘tenía serios problemas de conservación y requería una intervención urgente‘.
A modo de primera evaluación, la funcionaria remarcó que los problemas se ocasionaron por la forma en que estaba colgado ‘que no es como lo requiere un mural en tela‘.
El nuevo emplazamiento del Lex Legum responde a una decisión que se tomó en el mismo momento en que se descolgó del edificio municipal. Molinas había remarcado que el descanso de la escalera que lleva hasta el segundo piso ‘no es el ámbito más propicio porque está expuesto a una ventana y al calor‘.
Razones edilicias
El secretario de Cultura, Damián Rodríguez Kees, consideró necesario su traslado y su restauración al sostener que ‘la perspectiva visual es una de las limitaciones que presenta el lugar, estaba en un hall muy estrecho y se veía desde abajo, subiendo la escalera, con lo cual o mirabas el cuadro o el lugar dónde pisabas. Lo mismo pasaba al bajar. No estaba emplazado en un lugar que permita una visión relajada de la obra, la gente estaba en tránsito, y en tránsito peligroso por ser una escalera‘, dijo un año atrás.
También consideraban recomendable recuperar la función de la ventana sobre la que se había colgado el mural. En marzo de 2008 habían anticipado la idea de relocalizar la obra en una escuela, ‘con la intención de que puedan tener bienes culturales de la ciudad y los estudiantes tengan la oportunidad de poder dialogar diariamente a partir de la mirada de estas obras. Los murales tienen este objetivo, deben estar en lugares donde hay un tránsito importante de personas y la función educativa es central‘, finalizó Molinas.






