Lo primero que se debe hacer en estos casos es no ser tremendistas. Seguramente, el colonista habrá sentido anoche mucha impotencia al ver esas camisetas rojinegras ir de un lado a otro sin destino exacto ni ubicación. Pero Colón se encontró con un San Lorenzo muy afilado, que manejó a la perfección cada pausa y cada embestida en el ataque para filtrar sus hombres cuantas veces quiso dentro del campo sabalero. Y Colón perdió más que el invicto porque restó en seguridad, en la confección de la férrea defensa que pretende ser y, sobre todo, en el eje central de la formación: Blázquez ÄarqueroÄ ratificó su baja en el rendimiento; el "Chino" Garcé ÄlíberoÄ pasó al mediocampo pero no rindió; Capurro Ävolante centralÄ jugó más a la derecha y, cuando estuvo en su posición natural, no logró dominar el sector; y Ramírez Ädelantero centroÄ no puede rendir como lo demanda esta plantilla.

El primer (no el único) responsable de la derrota de anoche fue el técnico Mohamed. Con un planteo sin trabajo, el "Turco" intentó la disputa del balón en la mitad del campo, pero sus aspiraciones se terminaron al momento que San Lorenzo empezó a hacer uso del aprovechamiento territorial que, por cierto, conoce a la perfección.

Igualmente, el primer fusible fue el sistema táctico: Garcé es líbero, y la derrota anoche sirvió para no volver a incluirlo al "Chino" en una posición desconocida para él, sin antes haberse llevado a la práctica, claro está. Además, esa idea quizás le hubiese brindado a Colón la chance de controlar el avance del local, cosa que hizo hasta los 20 minutos del primer tiempo, pero no le hubiera dado el fútbol necesario para desequilibrar la última línea de San Lorenzo.

De entrada, se dieron algunos duelos que poco favorables le significaron a Colón. Garcé debía frenar el manejo de Ledesma, Candia tenía que parar a Silvera, entre Crosa y Aguilar iban en busca de Bergessio, Chitzoff seguía a Barrientos y Torres controlaba a González. Así formadas las parejas, el equipo sabalero especuló demasiado con lo que intentaba generar San Lorenzo sin atender su propia fábrica; no se puede "salir a ganar todos los partidos" ("Nosotros nos proponemos ganar siempre", dijo Mohamed anoche al término del juego) si no se abastece correctamente a los delanteros ni se defiende correctamente.