Con la lengua afeitada

Inquietante silencio

Por Betocas

Se están sucediendo una serie de hechos graves que deben ser analizados para pensar en las eventuales consecuencias. En el primer gobierno de Perón se hicieron cosas excelentes. Se comenzó a organizar el movimiento obrero (aunque luego haya adquirido muchas características francamente indeseables), se pensó en la salud y la educación para todos y, en 1952, la renta tuvo una distribución muy equitativa, para dar algunos ejemplos. Sin embargo, con el tiempo, esto fue acompañado de la pérdida de muchas libertades, la obligación de afiliarse al partido gobernante para acceder a un empleo público, la lectura obligatoria de ‘La razón de mi vida‘ en los colegios, etc. Pero se empezó de a poco. La actitud del gremio de los camioneros en relación a un pedido de información de la Justicia suiza con respecto al señor Moyano, podría ser un hecho aislado o no. El permanente hostigamiento a los diarios presuntamente opositores es un agravio a la libertad de prensa. De igual forma, la persecución a las consultoras privadas que dan a conocer distintos índices de inflación que el INDEC, es un atentado a la libertad de expresión. Y lo más preocupante es que dejando de lado a los partidos de la oposición y el repudio de los editores de los diarios, no se escuchó una voz de reproche por parte de los partidarios del gobierno. Por lo menos, es una situación inquietante que debería intranquilizarnos a todos.