Este lunes se imputó a dos hombres en el marco de dos causas que investigan el robo a una rotisería ubicada en calle Fray Cayetano Rodríguez al 3700, barrio Barranquitas, y el posterior ataque en la vivienda del dueño, en el que varios masculinos golpearon a sus dos hijos, de 9 y 14 años. La fiscal María Lucila Nuzzo solicitó audiencia para el tratamiento de la medida cautelar de ambos detenidos.
El primero de estos, Nahuel Maximiliano H. de 21 años, no pudo recordar su fecha de nacimiento ni su número de DNI al ser interpelado por la jueza Susana Luna, quien presidió la audiencia en la que se lo imputó como “coautor de robo calificado por el uso de arma de fuego”. El joven, que cuenta con antecedentes condenatorios, fue aprehendido mientras intentaba escapar de la rotisería “Riquísima” tras haber ingresado junto a otro masculino el sábado 30 de mayo en horas de la noche y sustraído una billetera y dos celulares a los clientes que se encontraban en el establecimiento.
Sin embargo, los delincuentes no contaban con que un policía del Comando Radioeléctrico estuviera allí también, vestido de civil porque estaba de franco. Al percatarse de la situación, y de que los asaltantes portaban armas de fuego, el oficial les dio la voz de alto, lo que produjo una persecución a los tiros mientras el imputado y su cómplice intentaban darse a la fuga. Herido, Nahuel Maximiliano H. fue aprehendido en Juan Díaz de Solís y Pasaje Cardona, mientras que el otro masculino -cuya identidad aún no se conoce- logró escapar.
Ya entrada la madrugada del domingo, y luego de la detención del joven, un grupo conformado por cinco masculinos irrumpió en la vivienda del dueño del local gastronómico violentando la puerta de ingreso. Allí dormían sus hijos, un niño de 9 y un chica de 14 años, a quienes golpearon y les manifestaron: “Esto es porque tu papá mató al pibe de Barranquitas”.
Además de amenazar a los menores, los delincuentes aprovecharon dicha oportunidad para hacerse con diferentes objetos de la vivienda, tales como dos televisores de 50 pulgadas, una garrafa, una mochila y celulares.
Tres de los invasores no pudieron ser identificados, mientras que los otros dos sí. Se trata de un menor, de 17 años, que fue aprehendido a unas cuadras del lugar llevando parte del botín. Junto a él se encontraba Marcelo Miguel N., de 29 años, quien dijo ser empleado municipal, en tareas de mantenimiento y limpieza. Fue imputado este lunes como “coautor de robo calificado por el uso de arma de fuego, por efracción, por ser en poblado y en banda, y por la participación de un menor”, en una audiencia presidida por la jueza Rosana Carrara.
La representante del Ministerio Público de la Acusación solicitó audiencia de medidas cautelares, en al que solicitará la prisión preventiva para ambos imputados, cuya defensa técnica está a cargo del Dr. Javier Casco, del Servicio Público Provincial de Defensa Penal.