Hace exactamente 33 años dejaba este mundo uno de los actores y humoristas que marcó la infancia de varias generaciones, dejando una huella en la cultura general no sólo de su México natal, sino también de gran parte de latinoamérica. El 9 de agosto de 1988 perdía la vida “Don Ramón”, el actor del mítico personaje de “El Chavo del 8”.
Ramón Esteban Gómez Valdés y Castillo, apodado “Monchito”, nació en Ciudad de México el 2 de septiembre de 1923. Tras un humilde pasar en su infancia, en 1949 se mudó a Ciudad Juárez, donde inició su carrera.
En el año 1968 conoció a Roberto Gómez Bolaños y allí su vida cambiaría por completo. Luego de representar diferentes personajes en series como Chespirito o El Chapulín Colorado, explotaría rotundamente con su papel como el padre de “La Chilindrina” en El Chavo.
Su salida del afamado show está bañada de rumores. Algunos afirman que renunció al programa por cuestiones salariales y otros indican que los conflictos internos entre los miembros del elenco habrían desencadenado su partida.
La teoría más firme nace de una declaración de uno de sus hijos, en la cual Esteban Valdés detalla que la renuncia fue motivada por el poder que se encontraba adquiriendo Florinda Meza, hecho que Don Ramón no podía tolerar ya que sólo aceptaría órdenes de Chespirito.
Luego de un último paso por un par de producciones poco exitosas junto a Carlos Villagrán, un cáncer de estómago provocado principalmente por su adicción al tabaco lo obligaría a dejar la actividad y le provocaría la muerte el 9 de agosto de 1988 a los 64 años, tras permanecer internado varias semanas en el Hospital Santa Elena de la Ciudad de México.
Con la presencia de su ex compañeros y personalidades del espectáculo, el modesto velatorio se llevó a cabo en la funeraria Gayosso de Sullivan y fue sepultado en el cementerio los Mausoleos del Ángel, donde todos los años miles de fanáticos los siguen recordando y venerando en cada aniversario de su fallecimiento.