Estados Unidos capturó un buque petrolero de Venezuela
El presidente Donald Trump anunció la incautación del embalse en las costas del Mar Caribe. La operación involucró a la Guardia Costera y agencias federales y apunta a crudo sancionado.
Fuerzas estadounidenses descienden en rápel a un petrolero frente a las costas venezolanas. Foto: Fiscal General de EE. UU. / vía REUTERS.
Estados Unidos incautó un petrolero frente a las costas de Venezuela, confirmó el presidente Donald Trump en Washington. La Casa Blanca informó que la acción la ejecutaron la Guardia Costera con apoyo del Departamento de Defensa y agencias federales por el presunto transporte de petróleo sancionado desde Venezuela e Irán. El anuncio aumentó la tensión entre Washington y Caracas y generó reacciones políticas inmediatas.
La fiscal general Pam Bondi difundió en su cuenta de X un video de la operación y detalló que el FBI, la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) y la Guardia Costera, con apoyo del Departamento de Defensa, ejecutaron una orden de incautación contra el tanker. Funcionarios que hablaron bajo condición de anonimato indicaron que la acción fue dirigida por la Guardia Costera con apoyo de la Marina; no se difundieron la identidad del buque, su pabellón ni el lugar exacto del abordaje.
Venezuela calificó la incautación como un acto de “intervencionismo ilegal y brutal” y el presidente Nicolás Maduro exigió el cese de lo que describió como un intento de apropiación de las reservas petroleras. El dirigente opositor Carlos Paparoni aseguró en X que el barco intervenido es el AZURE y afirmó que salía de Venezuela con intención de colocar combustible en el mercado negro internacional, eludiendo controles y sanciones.
“Acabamos de incautar un petrolero en la costa de Venezuela; un petrolero grande, muy grande, de hecho el más grande jamás incautado. Y están sucediendo otras cosas”, dijo Donald Trump, presidente
Detalles oficiales y pruebas difundidas
Bondi publicó un video de 45 segundos en el que se ve a militares descendiendo de helicópteros y abordando la embarcación con armas en la mano, y señaló que la operación se realizó de forma segura. Las autoridades afirmaron que el buque se venía utilizando para transportar petróleo sancionado desde Venezuela e Irán y que estaba sancionado por su participación en una red ilícita de transporte de crudo.
Fuerzas estadounidenses descienden en rápel a un petrolero frente a las costas venezolanas. Foto: Fiscal General de EE. UU. / vía REUTERS.
Desde la Casa Blanca sostuvieron que la investigación para impedir el movimiento de petróleo sancionado continúa y que se continuará recopilando pruebas sobre la red que, según Estados Unidos, respaldaría a “organizaciones terroristas extranjeras”. Por su parte, no se ofrecieron detalles sobre la propiedad del buque ni sobre el destino inmediato del petróleo.
Funcionarios estadounidenses adelantaron que se divulgarán imágenes adicionales de la operación y que se prevén nuevas determinaciones a medida que avance la investigación. En Washington, la medida se enmarca en una campaña más amplia de presión sobre el régimen de Nicolás Maduro impulsada por la administración de Trump.
Contexto regional y posibles efectos
La incautación se produce tras un aumento de la presencia militar de Estados Unidos en el Mar Caribe, que incluyó el despliegue de portaaviones y aviones de combate. El gobierno estadounidense fijó en agosto una recompensa de 50 millones de dólares por Maduro y el Pentágono realizó ataques contra presuntos barcos narcotraficantes que, según reportes, dejaron más de 80 muertos.
Maduro reapareció este miércoles mientras escala la tensión entre Venezuela y Estados Unidos. Foto: REUTERS / Leonardo Fernandez Viloria.
Analistas advirtieron que la operación podría afectar las exportaciones venezolanas porque otros transportistas podrían mostrarse reticentes a cargar crudo por el temor a represalias o sanciones. Gran parte del petróleo venezolano se destina a China a través de intermediarios y con descuentos por el riesgo asociado a las sanciones.
En el plano político, la incautación coincidió con la entrega del Premio Nobel de la Paz a la dirigente opositora María Corina Machado; su hija, Ana Corina Sosa, aceptó la distinción en Oslo, un dato que subrayó la intensidad del clima político en torno a Venezuela. La expectativa oficial ahora se centra en la investigación abierta y en las decisiones que adopten operadores comerciales y gobiernos aliados.
La justicia y las fuerzas federales de Estados Unidos mantienen la investigación en curso y las autoridades informaron que trabajan para impedir el movimiento del petróleo sancionado, mientras Caracas reclama la devolución del buque y denuncia una vulneración de su soberanía