Portavoz militar: las causas del 7 de octubre, la cúpula de hierro, una nueva infiltración, la tropa y la geopolítica

Roni Kaplan nació en Uruguay y lleva más de 20 años viviendo en Israel. Hoy es el encargado de la comunicación en español de las Fuerzas de Defensa Israelíes y, en medio de la guerra contra el terrorismo, recibió al enviado de El Litoral en Tel Aviv para responder aquellos temas que generan controversia en el debate general y en los foros de analistas políticos y militares. La entrevista completa.

-El mundo sabe lo que pasó el 7 de octubre, pero ¿Por qué pasó?

-Nosotros sabemos hace muchos años, Bryan, de la intención que tiene el Hamas y los grupos terroristas en general frente a Israel. Y la razón es porque nos agarraron descuidados y porque nos tomaron por sorpresa y no tuvimos la capacidad de repelerlos en el tiempo correcto. Pero por detrás de eso tienen una ideología de guerra santa, que habla de establecer un califato sobre las ruinas del Estado de Israel moderno, como parte de un califato mucho más amplio. Es una idea religiosa profunda de un grupo terrorista.

-A partir de ese momento la historia continuó, no solamente en la detección de los restos de quienes fueron asesinados, sino en intentar recuperar a quienes fueron secuestrados. ¿Cómo viene siendo el trabajo en esa línea? ¿Hay algún punto de contacto, por ejemplo, con los terroristas?

-La realidad es que tenemos un centro de comando y control, donde estamos monitoreando todo el tiempo cualquier tipo de información. Lamentablemente, en este caso, la libertad de información es menos importante que la seguridad física de los 239 secuestrados. En términos militares, lo primero que hicimos fue contrarrestarlos. Demoró varios días hasta sacarlos a todos de terreno israelí, contenerlos y luego nos estamos acercando a ellos. La ciudad de Gaza está absolutamente cercada, está absolutamente, diríamos, embolsada. Y nos estamos acercando también a lo que son las inmediaciones del hospital de Shifa, un hospital donde Hamas tiene por debajo capas y capas de túneles con sus cuarteles generales.

-Muchos están planteando lo que tiene que ver justamente con el accionar militar que Israel está llevando dentro de la franja de Gaza. ¿Qué aclaraciones se pueden hacer en ese sentido en cuanto a lo que tiene que ver con la protección de los civiles palestinos, pero también en la protección de los propios israelíes y ciudadanos de todo el mundo que de pronto han quedado secuestrados allí?

-La realidad, Bryan, es que toda guerra es trágica y básicamente es una guerra que no elegimos, es una guerra que Hamas nos impuso. Nosotros actuamos comprometidos con el derecho internacional. Cada uno de nuestros más de 15.000 objetivos que hemos alcanzado son objetivos militares. Y hacemos enormes esfuerzos para disminuir el daño a civiles en la franja de Gaza. Lamentablemente estamos viendo cómo Hamas utiliza hospitales, en muchos casos, o sus propios civiles como escudos, en el caso de los civiles como escudos humanos. Y en paralelo estamos ingresando con ayuda humanitaria. Más de 13.200 toneladas de ayuda humanitaria han ingresado por el Paso de Rafá en más de 850 camiones desde el día 21 de octubre. Y esta guerra no es una guerra ni contra el islam ni contra el pueblo palestino bajo ningún concepto. Es una guerra contra un grupo terrorista llamado Hamas que no es una campaña mediática. Es realmente más peligroso que el ISIS. Muchas veces se habla justamente de lo que tiene que ver con la diferencia de poder de fuerzas, por un lado, de las IDF y, por otra parte, justamente, de un grupo terrorista.

-¿La ralentización quizás de los tiempos que está teniendo Israel para lograr su objetivo tiene que ver con lo que recién mencionabas de intentar cuidar también los objetivos o los efectos secundarios sobre los civiles? ¿O con qué tiene que ver, digo, en el terreno ya táctico o militar, de por qué lleva un grupo terrorista donde todavía quizás los resultados no conforman principalmente a la población?

-También con eso y también con el hecho de que ellos salen constantemente de bocas de túneles. Hemos destruido más de 150 bocas de túneles en este momento. Uno puede pensar que esto es una pequeña guerrilla, pero se trata de un ejército terrorista, sofisticado, financiado, apoyado en sus planes, en todo lo que tiene que ver con ese ejército por parte de Irán. Son parte de un eje y, de alguna manera, nosotros no solamente estamos acá para restaurar la seguridad de nuestra familia, de nuestra ciudadanía, sino que también somos la primera línea de la lucha contra el terror en Occidente. No cabe la menor duda que este tipo de grupos terroristas son un peligro para todo Occidente. Desmantelarlos sería un win-win-win, un ganar-ganar-ganar, tanto para los palestinos, que se librarían del Hamas, para Israel, que recibiría seguridad, y, por otro lado, para un mundo que evitaría la propagación de un grupo terrorista que llama a infieles a todo judío y cristiano que hay en el mundo, básicamente.

-Recién hablabas de los aliados que lograron colaborar con Hamas para que logre tener el desarrollo que ha tenido. Dos preguntas sobre ese tema. Por un lado, ¿es solamente Irán quien contribuyó al desarrollo tecnológico-militar de Hamas? Y, por otra parte, ¿no logró observar Israel durante todo este tiempo que se estaban desarrollando de esa manera casi frente a sus ojos?

-La realidad es que Hamas estableció industrias militares y cada dólar que recibía de ayuda internacional, que era uno de los lugares que recibía más ayuda internacional en el mundo, en la Franja de Gaza, lo invirtió en infraestructura terrorista. Mientras Israel durante décadas estuvo invirtiendo en un sistema de defensa civil, en un sistema de defensa aéreo, el Hamas invirtió todo eso en muerte, en una industria de terror, en túneles, y eso es básicamente lo que sucedió. Con respecto a Israel, existió una concepción de que quizás el Hamas se pueda, básicamente, moderar. Decenas de miles de Gazatíes venían a trabajar aquí. Qatar ingresaba también con subsidios. Cientos de camiones entraban día a día con mercancías en la Franja de Gaza. Y, básicamente, no se entendió que ese grupo terrorista quería materializar sus intenciones y tener la capacidad de hacerlo. Estamos hablando de un grupo terrorista más fuerte de lo que uno se imagina básicamente en su inconsciente.

-Insisto en la pregunta para aquellos que por ahí no están tan envueltos en la situación y que les llama la atención justamente el poderío de Hamas, ¿la fuente de financiamiento es pura y exclusivamente de Irán?

-No solamente, no te olvides que Hamas es gobierno en la franja de Gaza desde el año 2007, recauda impuestos, recibe mucha ayuda también de la comunidad internacional, de la Unión Europea, recibe ayuda también de Estados Unidos, recibe ayuda de toda la comunidad internacional, también de Irán, ni que hablar como parte de este eje de terror entre Irán, Hezbollah, el mismo Hamás, los hutíes en el Yemen, las milicias chiítas iraquíes y otros agentes que están aquí por la zona. Y en este momento es importante, Bryan, tener en cuenta que estamos defendiendo a Israel en todos y cada uno de los frentes. Estamos conteniendo cinco frentes concentrados en Hamás, pero cada uno de los agentes iraníes alrededor de Israel quieren distraernos y quieren también, quizás, hablar en un frente frente a ellos.

-A eso quería ir, porque no solamente hoy deben tener ustedes cuidado de los ataques que son lanzados desde la franja de Gaza, sino también de misiles que son lanzados a miles de kilómetros, como los yemeníes. ¿Cuál es la situación frente a eso? ¿La reflexión o la llamada que hace el gobierno, o particularmente las fuerzas de defensa israelíes, a la comunidad internacional?

-Principalmente es frente a Hezbollah en el Líbano. Al Líbano y a la República del Líbano le decimos si acaso quieren poner en riesgo su futuro, el futuro de ese país, de esa ciudadanía, para que el Hezbollah ayude al Hamás y de esa manera nos arrastre a una guerra regional de todo el Medio Oriente. Y básicamente la comunidad internacional tiene que comprender que en este mismo momento que Israel estaba ensanchando sus relaciones de normalización, sus relaciones de paz con otros países árabes importantes aquí de la zona, es en ese momento que Hamás lanza el ataque apoyado por Irán y de esa manera logran desestabilizar todo el Medio Oriente. Nosotros estamos acá prontos para cualquier tipo de contingencia, no tenemos ningún tipo de intención de que esta guerra escale de facto a otros frentes, pero estamos viendo combates e intercambios de fuego constante con Hezbollah en el Líbano, cuando nuestra política de seguridad es muy clara. A cada punto que ellos nos disparan o cada ataque que hacen, nosotros atacamos de forma concreta al sitio donde emana ese ataque.

-Van a llevar casi 40 días de ataques continuos frente a los puntos que recién mencionabas, particularmente en Gaza. ¿Israel tiene margen militarmente para incluso hacer frente eventualmente una escalada en el resto de los puntos de lanzamiento frente a los restos potenciales enemigos?

-Somos 360.000 reservistas que llegamos aquí y ni uno dijo que no. Estamos todos aquí, somos cientos de miles de israelíes, la sociedad civil está absolutamente enrolada también a este esfuerzo, no tenemos otra opción. Es una guerra que no elegimos, es una guerra que se nos impuso y es una guerra que tenemos que ganar porque somos la primera línea de la lucha en Occidente contra el terror. Si el terror logra pasar esta barrera, rápidamente vamos a encontrarlo en otros lugares y no avisa cuando ataca.

-Queda claro que la disposición humana está prácticamente al 100% en acompañar la defensa del Estado israelí y de sus intereses vitales como nación. Pero en cuanto al poderío militar, a los fierros, como decimos en Argentina, ¿tiene capacidad todavía de reaccionar a él o se encuentra comprometido?

-Mecánicamente tenemos más fuerza que cada uno de nuestros enemigos y que todos los enemigos juntos. De hecho, estamos dispuestos, es decir, nuestras tropas están allí desplegadas frente al límite con el Líbano, frente al Hezbolá, el mismo grupo terrorista que cometió los ataques del año 1994 a la AMIA allí en Argentina y básicamente no hay ya una sorpresa estratégica por parte de Hezbolá. Puede ser una sorpresa táctica si es que ataca a las 2 y media de la mañana o a las 4 de la mañana, pero no hay sorpresa estratégica y efectivamente tenemos todo para ganarle a todos y cada uno de los enemigos, teniendo en cuenta que nuestra intención en este momento es desmantelar Hamas y devolver a nuestros rehenes.

-¿Qué comentarios llegan a la sede central sobre la moral de la tropa desplegada?

-Yo vine a Israel desde Uruguay hace prácticamente 21 años y nunca vi el ánimo del Ejército de este país en el lugar en el que está. Es una especie de oxímoron: por un lado, estamos en una tragedia nacional de luto. Todos tenemos amigos o amigos de amigas, etcétera, que fueron asesinados o que están secuestrados o que están heridos en este momento. Pero, por otro lado, somos un pueblo que sabe sobreponerse a las adversidades. Que lo que no lo mata lo fortalece. Y allí estamos luchando. No tenemos otra. Sabemos que vamos a sobreponernos. Sabemos que vamos a prevalecer.

- Por otro lado, ¿Cuál es la proyección que hacen de cara a lo que se viene aquí en la región de Medio Oriente en medio de esta crisis que están viviendo?

-Con respecto a Argentina, realmente es un tema que lo toca más el Ministerio de Exteriores. En términos generales, lo que te puedo decir es que somos el último bastión de Occidente en la lucha contra el terror. La gente piensa que esto es una campaña, pero no lo es. Realmente es un terror y son valores, básicamente, que no son los valores que compartimos. Es increíble cómo muchas veces el valor de la vida que promueve Israel, un país que ha transformado el desierto en campos florecientes, que ha se transformado en pionero en ciencia y tecnología en solamente 75 años, ese valor de la vida es eclipsado por el valor de la muerte del Hamas y muchas veces medios de comunicación y la misma academia están de alguna manera defendiendo a grupos terroristas que no tienen ningún tipo de... O sea, solamente porque es Israel en este momento el que está siendo atacado es que defienden a este tipo de grupos terroristas. Por otro lado, lo que se viene es, no me queda muy claro, se viene estabilidad en la región, pero para que venga la paz a este lugar y para que venga la estabilidad hay que eliminar el Hamas. Con el Hamas dentro de la franja de Gaza es imposible llegar a ningún tipo de paz y por eso estamos 100% abocados a eso, Bryan.

-¿Tiene fecha de vencimiento esta guerra?

-Desde nuestro lugar, en el momento que podamos restaurar la seguridad y la percepción de seguridad de nuestra población. Me decía mi pareja, mi esposa, el día de ayer que llegué a casa que ya hace días está durmiendo con el cuchillo abajo de la almohada. Así se siente la gente en Israel y básicamente no nos queda otra que restablecer la seguridad. Hamas fue quien comenzó esta guerra. Nosotros la vamos a terminar. La cantidad de muertos en el camino no depende de Israel, depende del jefe de Hamas y del jefe del ejército terrorista del Hamas.

-Duermen con el cuchillo abajo de la almohada acá en Tel Aviv. Ya no los pueden tomar por sorpresa, seguramente como ocurrió el 7 de octubre. Sin embargo, en el abanico de posibilidades, ¿todavía existe en el análisis de las fuerzas armadas israelíes que pueda haber un ataque de infiltración como la hubo en el 7 de octubre o incluso peor?

-Puede ser, porque en el límite con la franja de Gaza vos tenés que los asentamientos o los poblados alrededor de Gaza están a uno o dos kilómetros, tres kilómetros de la franja. Mientras que, en el límite con el Líbano, que tiene 120 kilómetros desde el Mediterráneo hasta la triple frontera, Líbano, Siria, Israel, tenés 22 poblados que están al lado mismo del límite. Entonces, si bien el ejército está ahí ya presente, sí, es una posibilidad que haya algún tipo de ataque de infiltración. Durante muchos años ya estaban absolutamente frustrados los grupos terroristas que esa intención de asesinar a civiles israelíes por intermedio de cohetes no se podía materializar por el sistema de defensa civil y el sistema de defensa aéreo, pero sin tener en cuenta, Bryan, que acá hay una diferencia total entre lo que es la moralidad de un país que defiende a su población y la inmoralidad de un grupo terrorista que utiliza a sus civiles para defender a su infraestructura.

-¿La cúpula de hierro está funcionando en la efectividad que pretende? ¿Las tropas de infantería y los blindados que están desplegados dentro de Gaza, por ejemplo, están teniendo también el resultado esperado?

-Definitivamente. La cúpula de hierro está logrando interceptar en porcentajes altísimos, cercanos al 90% de los cohetes que decide interceptar porque van a caer en una zona densamente poblada, y, por otro lado, en cada uno de los combates que nos hemos encontrado con el Hamas a 10 metros o cara a cara, cuerpo a cuerpo, son combates que hemos salido triunfantes. Es claro que en el momento que tenemos un objetivo político claro de desmantelar al Hamas, el ejército sabe hacer su trabajo, estamos logrando avanzar. No he escuchado ningún caso, ni siquiera puntual, de que los terroristas del Hamas lograron frenarnos en nuestro avance.