Uruguay fue golpeado por un intenso temporal en su principal balneario, Punta del Este, y también en su capital, Montevideo. Los fuertes vientos, con ráfagas que superaron los 100 kilómetros por hora, y las precipitaciones causaron inundaciones, desprendimiento de embarcaciones y la caída de árboles, generando múltiples emergencias.
Emergencia
Vientos intensos y destrozos: un temporal azotó el sur de Uruguay
La tormenta provocó daños en el puerto, la pérdida de varias embarcaciones y complicaciones para los vecinos de la zona costera. Equipos de emergencia actúan para contener los efectos y asistir a la comunidad.
Punta del Este devastado
El impacto más visible del temporal se concentró en el emblemático puerto de Punta del Este, un punto neurálgico para el turismo uruguayo. La marea, impulsada por la furia del viento, subió drásticamente e inundó por completo los populares kioscos de venta de pescado, transformando el área en una extensión acuática.
Un caso particularmente dramático fue el de tres veleros que se soltaron de sus anclajes, siendo impulsados hacia la costa y terminando chocando contra la pasarela de ingreso al puerto.
La situación en las calles de la ciudad no fue menos complicada. La principal arteria de Punta del Este, la avenida Gorlero, vio su tránsito interrumpido la noche del lunes debido a la caída de un árbol de gran porte. Afortunadamente, este incidente, aunque espectacular al precipitarse entre dos vehículos, no causó daños materiales a ninguno de ellos, un detalle que muchos consideraron un verdadero milagro.
Las ráfagas de viento, que aún este martes por la mañana rondaban los 67,7 kilómetros por hora en la costa, se esperaban que comenzaran a amainar hacia el mediodía, ofreciendo un respiro a los habitantes y equipos de emergencia que trabajaban incansablemente para restaurar la normalidad en la ciudad costera.
Terror en Montevideo
La capital uruguaya, Montevideo, también sintió la furia del temporal, con un incidente particularmente impactante que captó la atención pública. En la tarde del lunes, un contenedor con paredes de isopanel se desplomó sobre un vehículo que intentaba ingresar al estacionamiento del Punta Carretas Shopping.
Las violentas ráfagas de viento fueron las responsables de que la estructura, que se encontraba apoyada sobre otro contenedor, cediera y cayera directamente sobre el automóvil. La única ocupante del vehículo, una mujer, quedó atrapada en su interior en un momento de terror y confusión, con la pesada estructura aplastando parte de su automóvil.
Pese al miedo de que la estructura se derrumbara aún más, se percató de que había sobrevivido y no presentaba heridas. Personal de Bomberos acudió rápidamente al lugar y logró rescatarla, tras una ardua labor. Posteriormente, fue trasladada a un centro asistencial, fuera de peligro, tras el traumático suceso que la dejó en estado de shock, pero milagrosamente ilesa.
El balance de la furia natural
La magnitud del temporal se reflejó en el elevado número de llamados de emergencia que colapsaron los servicios. El Centro de Gestión de Emergencias de la Dirección Nacional de Bomberos gestionó más de 180 llamadas relacionadas con las inclemencias del tiempo, principalmente por la caída de árboles y voladuras de techos en diversas zonas del país, lo que habla de la extensión de los daños.
Por su parte, la Intendencia de Montevideo recibió 52 denuncias solo hasta la noche del lunes, evidenciando la concentración de daños en la capital, que también sufrió de manera significativa.
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