Los termos Stanley se convirtieron en un objeto casi aspiracional para los argentinos en los últimos años. Así mismo, su calidad y demanda, hizo qué su valor se dispare en el mercado argentino y actualmente ronda los 11 mil pesos. Mientras tanto, en Estados Unidos, los clásicos de un litro cuestan unos USD 20 ($ 3.960 al dólar informal).
A pesar de que no hay faltantes y los productos se consiguen normalmente en locales y tiendas de comercio electrónico, las dificultades para la importación también afectan a la empresa que los trae al país lo que complicó planes para incorporar más productos de la marca al mercado local.
Sin embargo, consiguieron incorporar nuevos productos en los últimos meses como ser, los mates térmicos con distintos colores. Se trata de un mate de acero, que permite conservar la temperatura del agua y la yerba. Ahora, además del verde tradicional de la marca, se suman cuatro colores: blanco, negro, azul y rojo.
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Foto: Gentileza
La marca continúa siendo muy demandada por los argentinos y según contaron tiempo atrás sus importadores, la venta de los famosos termos verde militar durante una muestra en La Rural y el acuerdo con Taragüí para que lo usen los jugadores de la Selección lograron imponerlo como un producto deseado y de uso cotidiano. Los famosos que compartían sus fotos en redes hicieron el resto.
Detrás de la estrategia estuvo la empresa argentina Parallel, una firma dedicada a representar marcas internacionales, que hizo una propuesta a la dueña de Stanley para poder vender la marca en el país en 2012 y, luego de largos procesos, consiguieron lanzar el producto a mediados de 2015.
Al principio, se decidió que en la Argentina solo se vendan termos verdes, cuando la empresa los fabrica también en otros colores, como parte del plan de posicionamiento. Luego, llegaron al mercado local otros productos, con diferentes colores y hasta un mate térmico con el logo de la empresa. También lograron que en los Estados Unidos diseñara un “pico matero” especial solo para los artículos que se venden en la Argentina y Uruguay.
Así, un producto y una marca nacida en los Estados Unidos y destinada a un mercado muy específico como las actividades al aire libre, tuvo un cambio de rumbo y un éxito inesperado en la Argentina.
Su crecimiento en el mercado local sorprendió hasta a los dueños de la marca estadounidense. Para ellos, la Argentina fue un “caso de éxito” y se convirtió en uno de los cinco principales mercados que tiene la compañía.