La nueva alternativa a la sandalia básica que marca el verano 2026
Colores intensos, diseños llamativos y un giro estético inesperado redefinen el calzado de los días de calor, con modelos que priorizan comodidad sin resignar identidad y se convierten en protagonistas del look estival.
La fusión entre confort y diseño que marca el rumbo del calzado para la temporada.
La moda de verano empieza a despedirse de los clásicos previsibles y abre paso a una alternativa mucho más audaz. En esta temporada de calor, las sandalias básicas ceden protagonismo frente a un calzado que combina diseño, comodidad y una fuerte identidad visual. El estampado ya se posiciona como uno de los hits indiscutidos en las vidrieras.
Lejos de los tonos neutros y las formas minimalistas que dominaron años anteriores, la nueva tendencia apuesta por imprimir carácter desde los pies. Colores intensos, dibujos llamativos y combinaciones inesperadas marcan el pulso de una moda que invita a jugar y animarse.
El fin de la sandalia clásica
Durante mucho tiempo, la sandalia lisa fue la opción segura para enfrentar las altas temperaturas. Práctica, combinable y funcional, se convirtió en un básico casi automático del guardarropa estival. Sin embargo, este verano la escena cambia: diseñadores y marcas apuestan a modelos que se destacan por su impronta visual y su capacidad de transformar un outfit sencillo en uno con personalidad.
Modelos con estampas vibrantes que transforman cualquier look.
El nuevo calzado protagonista mantiene la comodidad como premisa, pero suma un fuerte impacto estético. Suelas anatómicas, tiras ergonómicas y materiales livianos se combinan con estampados que van desde lo artístico hasta lo geométrico, pasando por referencias tropicales, abstractas y retro. El resultado es un equilibrio entre confort y diseño que seduce tanto para el día como para la noche.
Eje de la temporada
El gran diferencial de esta alternativa está en el protagonismo del estampado. Ya no se trata solo de un detalle decorativo, sino del corazón del diseño. Flores maxi, rayas irregulares, mix de colores vibrantes y gráficos inspirados en la naturaleza o el arte urbano dominan las colecciones de verano.
Colores intensos que definen la nueva tendencia para los días de calor.
Esta tendencia dialoga con una moda más expresiva y menos rígida, donde cada prenda cumple un rol comunicativo. El calzado deja de ser un complemento discreto y pasa a ocupar un lugar central en el look. Incluso los conjuntos más simples, como vestidos lisos o shorts básicos, encuentran en estos modelos el toque diferencial que eleva la propuesta.
Además, el estampado permite mayor versatilidad: lejos de limitar las combinaciones, abre el juego a nuevas mezclas y estilos, desde lo urbano hasta lo playero, sin perder coherencia.
Cómo sumarlos al guardarropa diario
Incorporar esta tendencia no requiere un cambio radical. La clave está en usar el calzado como punto focal y construir el resto del outfit de manera equilibrada. Funcionan especialmente bien con prendas monocromáticas, telas livianas y siluetas relajadas, ideales para los días de altas temperaturas.
El calzado protagonista del verano.
También se adaptan a distintos momentos del día. Durante la mañana, pueden acompañar looks informales y frescos; por la tarde, suman personalidad a outfits más armados; y en salidas nocturnas al aire libre, aportan un aire moderno sin perder comodidad.
Claves para elegir el modelo ideal
Priorizar materiales livianos y respirables
Optar por suelas cómodas que permitan caminar varias horas
Elegir estampados que dialoguen con la paleta habitual del guardarropa
buscar diseños que funcionen tanto de día como de noche
Equilibrar el protagonismo del calzado con prendas más neutras
Una tendencia que llegó para quedarse
Más que una moda pasajera, esta nueva alternativa refleja un cambio en la forma de vestir durante el verano. La comodidad sigue siendo central, pero ya no alcanza por sí sola: el diseño y la expresión personal ganan terreno. El calzado estampado responde a esa búsqueda de identidad y se consolida como una opción fuerte frente a la sandalia tradicional.
Las vidrieras ya lo confirman y el street style lo refuerza: este verano, los pies también hablan. Y lo hacen con color, formas audaces y una invitación clara a dejar atrás lo aburrido.