Apuntes informales alrededor de las fiestas de fin de año

La secretaria de la Asociación Santafesina de Pediatras recordó al doctor Raúl Bianco que al iniciar diciembre era tradición enviar a los socios los saludos del presidente. La mujer ofreció elegir entre tres modelos de tarjetas postales, todas con el mensaje impreso: ¡Feliz Navidad! ¡Próspero Año Nuevo! ¡Feliz día de Reyes! El doctor rechazó la que tenía en su portada un pesebre dorado. Tampoco le gustó la del pino nevado, con bolas rojas colgando de las ramas y, menos aún, la del Papá Noel en el trineo con los renos volando. Una que apenas se abría lanzaba los acordes de "Din Dong Bell", musiquita que a la tercera vez de escucharla haría gritar improperios a la mismísima Madre Teresa de Calcuta.

Bianco dispuso que ese año los buenos deseos se enviaran a través de mensajes electrónicos. Si bien él argumentó motivos estéticos, lo que primó fue su piamontesa obsesión por reducir gastos. Lo que sigue, es el saludo -algo sacrílego- que en diciembre de 2009 recibieron los pediatras de Santa Fe en las casillas de correos de sus computadoras:

"¡Vienen días de fiestas religiosas y también pediátricas! Así fue durante mucho tiempo, antes que Coca-Cola inventara a Papá Noel y las Cámaras de Comercio sumaran a los adultos al intercambio de obsequios. Pues hasta hace cincuenta años los regalos de Navidad eran sólo para los niños".

Es obvio que el 25 de diciembre se celebra el nacimiento de un niño. Producto de un parto extrahospitalario, con serios riesgos de sufrir una infección zoonótica, si se tiene en cuenta la variedad de animales que lo rodeaban (1). Cualquiera podía comprobarlo al ingresar a la iglesia del pueblo de Ceres, para ver en el pesebre con figuras de yeso pintado, al buey, la mula y los corderos, más un carpincho que nadie sabía explicar cómo había llegado a Belén.

Hasta 1960, el feriado del 1 de enero era para celebrar la Circuncisión de Nuestro Señor. El prepucio de Jesús, un bebé judío, fue cercenado al octavo día de nacer. El santo corte se postergó para evitarle al recién nacido, tétanos y hemorragias. Mientras tanto, la madre se esforzaba para prenderlo a su teta y el padre completaba los papiros de OSPACA (Obra Social para Pastores y Carpinteros).

El 6 de enero se celebra la Epifanía. Día en el que Jesús fue expuesto a los Reyes Magos venidos de Oriente. El venerable momento de la adoración de los Reyes quedó reflejado por los cuadros de los grandes pintores del Renacimiento; también en los almanaques de la mercería "Al divino botón", de Ceres.

En todas esas obras se pueden ver a los tres Reyes montados sobre camellos, cargando bolsas con ofrendas de oro y resinas de maderas traídas desde las tierras ubicadas entre los ríos Tigris y Éufrates; actual Irak. En los tiempos que corren es probable que ese trío de monarcas, en lugar de Belén de Judea, terminase en Guantánamo de Cuba (2). Con mamelucos naranja, capuchas y esposados. Los camellos también jorobados, por supuesto. ¡A quién se le ocurre llegar desde Irak, sin afeitar, con esas bolsas tan sospechosas!

Si la visita de los Magos ocurrió dos semanas después de la parición y la madre y el niño continuaban en el establo, sin dudas se trató de un puerperio prolongado en condiciones desfavorables. Para entonces, es probable que el bebé rompiera en llanto a cada rato a causa de los cólicos abdominales. En una página de la Biblia, lamentablemente extraviada por un aprendiz de la imprenta del señor Johannes Gutenberg, se leía: "Cuando los Reyes levantaron al lactante para adorarlo y consolarlo, el carpintero José, extenuado, dijo a la santa de su mujer: ¡Che María…si estos logran que el Niño se calme, son magos de verdad!"

PD: Más allá de lo que augure el horóscopo, la "historia clínica" de Argentina anuncia: …En muchas familias la Navidad no será feliz y el 2010 vendrá menos próspero. También se pronostica: …durante los próximos doce meses, nacerán 750.000 niños. Ellos van a necesitarlos. ¡Felices fiestas!

¿Qué hay de nuevo?

¡Este Black Friday 2024 es tu oportunidad de stockearte para las fiestas con los mejores descuentos del año! (3). Fue lo primero que leyó el viejo doctor Raúl Bianco al abrir la notebook. No tuvo en claro por qué, pero ese anuncio lo llevó a buscar aquel saludo dirigido a los pediatras santafesinos, años atrás. Cuando lo encontró en la carpeta "Archivo 2009", se detuvo en el párrafo final, el que auguraba fiestas pocos felices y pedía pediatras activos para atender a los más de setecientos mil argentinitos que nacerían durante el nuevo año.

Muchas cosas cambiaron… Ya nadie espera recibir en sobres con estampillas de colores, tarjetas con pesebres. Los saludos "findeañeros" tampoco arriban a las casillas del e-mail. A partir de las dificultades que un muchacho ucraniano tuvo para comunicarse con sus amigos durante sus vacaciones en Argentina, al viajero se le ocurrió desarrollar WhatsApp (4), una aplicación de internet que desde 2012 monopoliza el envío de mensajes instantáneos. En las puertas de los comercios del centro desaparecieron los panzones que con blancas barbas postizas, vestidos de rojo y calzando botas negras, te recordaban que en diciembre tenías que comprar regalos.

Todavía es posible encontrar algún Santa Claus en el shopping del puerto, sentado en el medio del paseo, rodeado de chicos sonrientes mientras los padres los apuntan con sus celulares. Sí, la vida se tornó más amable con Papá Noel, en lugar de caminar por San Martín bajo el impiadoso sol santafesino, ahora solo tiene que permanecer en un cómodo sillón y con aire acondicionado (que siempre estará a tres grados por debajo de lo que recomienda la empresa de energía).

El doctor Bianco no previó la enorme caída en la cantidad de nuevos nacimientos. En 2022 llegaron doscientos sesenta mil argentinitos menos que hace diez años (5). También descendió el interés de los estudiantes, y de los Ministerios de Salud, por la pediatría. A pesar de que desde 2009 en el país el número de facultades de Medicina aumentó de 24 a 47, en 2023 quedaron vacantes el cuarenta por ciento de los cargos para capacitarse como médico de niños.

En este final de 2024 al viejo doctor lo entristece comprobar que hay situaciones que siguen igual. En Argentina las próximas fiestas tampoco serán felices para muchos niños que viven en la pobreza (6) y en el mundo, las guerras se multiplican y otra vez los humanos están amenazados por la posibilidad de un desastre nuclear (7). Mientras tanto las Naciones Unidas son impotentes para frenar el terror desatado por líderes enajenados que proclaman que su Dios es más importante que el de los otros.

Sin embargo cada vez que se acerca la Navidad, al escéptico, al amargo Raúl Bianco le llegan ráfagas de esperanza. Él se desconcierta pues no encuentra argumentos racionales para sentirse optimista. El finado Julio Cortázar se lo hubiese explicado así: "Probablemente, de todos nuestros sentimientos el único que no es verdaderamente nuestro es la esperanza. La esperanza le pertenece a la vida, es la vida misma defendiéndose".

¡Feliz Navidad! ¡Próspero Año Nuevo! ¡Feliz día de Reyes!