A la vera de la Ruta 1, en el norte santafesino, Romang es un pueblo de 8.000 habitantes con fuerte impronta suiza y un calendario cultural propio, con la clásica Fiesta Provincial del Sol como marca regional. En 2025, el festejo se adelantó por el fútbol.
Romang FC, fundado en 1927, metió un pleno que no abunda en la Liga Reconquistense: ganó el Apertura, el Clausura y el Torneo Petit. Con esa triple corona, aseguró plaza en el Torneo Regional Federal Amateur y también en la Copa Santa Fe.
Un equipo campeón con vida de club
La vuelta olímpica tuvo un detalle que explica el tamaño de la hazaña: gran parte del plantel sostiene su rutina con trabajos fuera de la cancha. En el día a día, hay jugadores que hacen mantenimiento en el propio club: césped, limpieza del predio, pintura de tribunas.
En ese escenario apareció un entrenador joven, de la zona, con pasado de futbolista en Platense de Reconquista, Colón y Boca Unidos, y un tramo en el ascenso italiano. Lucas Batistuta asumió en diciembre de 2024 y en pocos meses cambió ritmo, hábitos y ambición.
La identidad de juego y el salto de calidad
Llegó con un cuerpo técnico más amplio de lo habitual en la categoría, sumó jornadas de entrenamiento y bajó una idea de juego protagonista, intensa, que empujó al equipo a competir desde la pelota y también desde el orden.
En la definición del Petit, Lucas sorprendió al plantel al invitar a los familiares a la charla técnica previa. Después, la imagen fue la del pueblo completo cantando desde la tribuna y un DT que no escondió la emoción.
La lección del apellido y la promesa pendiente
Lucas contó que en su casa se aprendió a “ganarse las cosas” y que su papá le bajó una idea clara desde chico: no vivir del peso del apellido. Incluso, cuando apareció la chance de ir a probarse, le sugirió presentarse como Lucas Fernández, el apellido de su madre.
También recordó otra frase que ahora vuelve a escena: antes de acompañarlo con contactos y experiencias formativas, Gabriel le pidió que primero demostrara en su camino. “Ganate dos títulos y después lo charlamos”, fue el desafío. Lucas ya sumó tres y lo dice sin vueltas: ahora le toca a él.
Romang FC ya mira al Regional con la vara alta y el proyecto en marcha. En un fútbol donde todo cuesta doble, el DT que llegó “desde abajo” dejó una marca de estilo y resultados. Y, con el tricampeonato en la mano, empuja una puerta más: la que se abre con trabajo, no con apellido.