La presidenta Cristina Fernández de Kirchner destacó hoy la "década ganada" por Argentina desde la llegada del kirchnerismo al poder en 2003 en materia de recuperación social y desarrollo económico, al inaugurar el 131 período de sesiones ordinarias del Congreso en Buenos Aires.
“Esta es una década ganada, no en términos electorales ni partidarios, sino de recuperación social, de desarrollo económico, y de igualdad de los 40 millones de argentinos", afirmó la jefa de Estado.
"Vamos por más, siempre", subrayó Fernández de Kirchner al enumerar los logros en el área educativa y el piso de aumento salarial otorgado a los maestros.
La presidenta destacó en el inicio de su discurso sobre el "Estado de la Nación" ante la Asamblea Legislativa la celebración este año de dos aniversarios "muy fuertes", los 30 años de la recuperación democrática de la Argentina y los diez años de gobierno kirchnerista desde la asunción de la presidencia de Néstor Kirchner (2003-2007), su fallecido esposo.
En su discurso ante un Congreso colmado por legisladores, funcionarios y manifestantes partidarios, no se refirió a los resultados obtenidos en 2012, un año en que la economía argentina sufrió una marcada desaceleración, sino que se centró en enumerar los logros económicos y sociales conseguidos en la década desde la llegada del kirchnerismo al poder en 2003.
"Desarrollo y crecimiento son las dos palabras que más sintetizan estos últimos años", aseguró, al puntualizar que "el crecimiento con inclusión social es la clave".
Desde 2003, señaló, se crearon 200.000 empresas, un 64 por ciento más de las que había entonces, y se generaron casi 500.000 puestos de trabajo por año, el triple de lo que se creó anualmente desde el retorno de la democracia en 1983. En tanto, se redujo en un 67 por ciento la desocupación, que en el último trimestre de 2012 se ubicó en 6,9 por ciento.
Fernández de Kirchner destacó además que "el salario mínimo creció un 1.338 por ciento". "Jamás hubo una recuperación tan importante" del ingreso de los trabajadores, subrayó, al detallar que el salario mínimo se ubicó en "2.875 pesos, frente a los 200 pesos de cuando él (por Kirchner) se sentó en este sillón" en 2003, cuando las jubilaciones "eran de 150 pesos".
El salario mínimo argentino es actualmente "el mejor de América Latina", destacó, tras lo cual remarcó que "la cantidad de trabajadores registrados es las más alta de los últimos años, 92 por ciento más que hace diez años".
"La Argentina es el país que tiene el índice más alto de cobertura social en América con 94,3 por ciento", precisó además.
La jefa de Estado subrayó por otra parte que en "esta década ganada" el PIB se expandió un 105 por ciento. Según detalló, el plan de infraestructura contribuyó con un "3 o 4 por ciento anual del PIB". La inversión en obra pública se multiplicó 44 veces en la década entre 2003 y 2013 y ascendió a 295.000 millones de pesos (unos 58.415 millones de dólares a la cotización actual).
También destacó la inversión en materia educativa y sanitaria, y la asistencia social, con el subsidio Asignación Universal por Hijo que beneficia a 3,3 millones de niños.
En otro orden, aseguró que Argentina también registró "una década ganada en política exterior", en el marco de la cual destacó que la relación con Brasil representa una "política de Estado", al igual que la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y la integración latinoamericana.
Reiteró además el reclamo argentino al "Reino Unido de diálogo sobre la soberanía en las Islas Malvinas como indica la resolución de las Naciones Unidas". "No pedimos que nos den la razón, sino simplemente sentarnos a dialogar, porque creemos que la diplomacia es el único camino para defender la paz. La soberanía la queremos pero la queremos con paz", afirmó Fernández de Kirchner.
Pidió asimismo que la justicia avance en los casos contra funcionarios, porque con la demora de las causas "uno termina siendo culpable mediáticamente sin poder defenderse". "Sería bueno que tuvieran el derecho todos los argentinos de saber por qué se los juzga y de qué se los juzga", sostuvo.
Defendió además el memorando de entendimiento firmado con Irán para esclarecer el atentado en 1994 a la mutual judía AMIA en Buenos Aires, que dejó 85 muertos, y que fue ratificado esta semana por el Parlamento argentino.
"Teníamos que destrabar esto. ¿Qué es lo peor que podría pasar? Vamos a estar exactamente igual que ahora, por eso, ¿cómo no intentar resolver los problemas?", exclamó ante los aplausos de los presentes. E instó a "no permitir que esta desgracia sea utilizada con fines de geopolítica internacional".
DPA








