El jueves 23 Federico, junto a Rubén Walesberg y Cristian Vital, había participado de la modalidad de Lucha Grecorromana, y sumado una presea de bronce en la categoría hasta 84 Kg. El sábado, por la categoría hasta 96 Kg., De La Peña también consiguió una medalla de bronce para Argentina, siendo el único de los tres santafesinos en participar de las dos modalidades.
¿Por qué se dio esto de competir también en la modalidad de Lucha Libre?
Surgió la oportunidad de meterme en esa modalidad -estilo Libre, en hasta 96kg- porque Argentina dejaba vacante esa plaza. Es decir, como pasa en casi todos los torneos, la FALA (Federación Argentina de Luchas Asociadas) no tiene la capacidad monetaria para mandar el equipo completo, que son siete categorías por peso en Grecorromana y siete en Libre, más algunas de las mujeres. Si a esto le sumamos que los luchadores deben ser acompañados por lo menos por un entrenador, un jefe de equipo, y algún otro cargo –nosotros no, pero por ejemplo los otros países llevan varios entrenadores, fisioterapeutas, etc.- el presupuesto se hace muy elevado.
¿Cómo te sentiste en la competencia, en una categoría en la que quizás, por tu peso, dabas ventajas?
Meterme en otra categoría en la cual no entreno y en la que regalo más de 12 kilos -es hasta 96 Kg., pero el día de la lucha están en los 100 Kg.) parecería a priori ser una locura o un simple capricho, incluso podría traer lesiones; sin embargo tuvo sus beneficios: el torneo vale por dos, la experiencia es doble. Hoy por hoy, nosotros vamos a eso, a buscar experiencia competitiva; y por otro lado es otra oportunidad para representar al país, y eso es un orgullo personal, porque no es cosa de todos los días.
¿Qué representan estas medallas de bronce?
A pesar de haber perdido las tres luchas que tuve (dos en 84 Kg. y una en 96 Kg.) en ambas categorías pude obtener medallas de bronce, ya que sólo había cuatro participantes en las dos modalidades. No es la forma en que me hubiese gustado ganarlas, pero no deja de ser un reconocimiento muy importante. Los luchadores que enfrenté tenían una extensa carrera deportiva, coherente a la tradición de sus países en la Lucha, y al constante apoyo que reciben, que no es solo económico. Todo esto en contraste con los pocos años que tiene la actividad en Santa Fe, el casi nulo apoyo económico, la poca historia reciente y la escasísima difusión, puesto que ni los profesores de educación física siquiera saben de su existencia, y eso que es el deporte olímpico fundador. No obstante en los últimos años esto viene cambiando, y espero sigamos en este rumbo, para lo cual no debemos quedarnos de brazos cruzados.






