Un informe de la Bolsa de Cereales de Rosario señaló que “la campaña agrícola 2010/2011 parece haber atravesado su etapa crítica” en materia climatológica, y estimó que “el resultado global apunta a ser esencialmente satisfactorio”.
En un informe titulado “Perspectiva agroclimática para la campaña agrícola 2010-2011”, elaborado por la Bolsa de Cereales de Rosario, se destacó que “las oportunas lluvias ocurridas en enero alejaron la posibilidad de un impacto negativo generalizado” de las sequías de los meses anteriores.
“Si bien se pronostica que febrero y marzo se observarán precipitaciones algo irregulares, es muy probable que las mismas sean suficientes para compensar el moderado consumo de humedad que las menores temperaturas”, añadió el informe.
Además, mencionó que “la posibilidad de un final de verano y un otoño con lluvias escasas augura buenas condiciones para la maduración y cosecha, así como un bajo riesgo de enfermedades y plagas”.
Sin embargo, el estudio afirmó que desde una perspectiva más detallada se observan ciertos problemas, como algunas zonas que no han recibido un alivio efectivo a la sequía dentro de la Región Pampeana y la Mesopotamia, “por lo que podrían producirse impactos puntuales”.
El Noroeste, gran parte del Chaco, el extremo norte de la Región Pampeana y el norte de la Mesopotamia “podrían sufrir daños por exceso de lluvias y viento, favoreciendo las plagas y enfermedades, y causando desbordes y anegamientos”.
Por otra parte, el estudio afirmó que “el extremo sur del área agrícola podría estar expuesto a heladas tempranas a partir de la segunda quincena de abril, con riesgo para los lotes tardíos de cultivos de verano”.
Por último, el informe concluyó que “los problemas no invalidan el hecho de que el resultado global de la campaña agrícola apunta a ser esencialmente satisfactorio, a pesar de la influencia negativa del episodio de La Niña que la afectó”.
Zona núcleo
Así, los cultivos sojeros de la zona núcleo del área agrícola nacional se vieron beneficiados lo que redundarán en un impacto favorable sobre los rendimientos de la oleaginosa.
Según los especialistas, esta humedad tendrá “un impacto directo” sobre los rendimientos que ofrecerá la soja en las regiones mencionadas, ya que este cultivo se encuentra en general entre R1 y R6, y con un nuevo escenario de reservas de agua.
Gracias a las últimas lluvias, se observan como reducidas las áreas que exhiben escasez de humedad en la región núcleo y, en algunos casos, la humedad es suficiente para llegar a cosechar sin limitantes hídricas.
Los reportes técnicos ofrecidos por la bolsa rosarina indican que para los próximos días, se espera que el centro de baja presión se desplace hacia el este, generando un cambio en las condiciones de tiempo en toda la región de cobertura, aunque la zona se mantendrá con abundante nubosidad y tiempo inestable.
Tras la sequía
Pronostican "satisfactoria" campaña agrícola
La posibilidad de un final de verano y un otoño con lluvias escasas augura buenas condiciones para la maduración y cosecha, así como un bajo riesgo de enfermedades y plagas.
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