La historia de Jorgito, el niño de 3 años que fue asesinado a golpes en septiembre de 2018, conmocionó a todos los santafesinos. A dos años y medio de esa terrible tarde, y con su padrastro muerto, la madre del chico firmó un juicio abreviado por 16 años de prisión.
Golpeado y abusado
Caso Jorgito: la madre aceptó pasar 16 años en prisión por asesinar a su hijito
Lo hizo al firmar un acuerdo de juicio abreviado, a más de dos años y medio del hecho. La violencia de género en la que estaba inmersa sirvió de atenuante de la pena.
El tribunal compuesto por los jueces Jorge Patrizi, Rodolfo Mingarini y Gabriel Candioti admitió este lunes el escrito en el que Florencia Estefanía Zajur (23) aceptó su responsabilidad en la muerte de su hijito. El mismo prevé una pena de 16 años de prisión por la coautoría del "homicidio calificado por el vínculo", en el que concurrieron circunstancias extraordinarias de atenuación por encontrarse la mujer inmersa en un contexto de violencia de género.
Esto último surgió de dos informes, requeridos por el abogado defensor Alejandro Otte, elaborados el primero por el Dispositivo Interdisciplinario de Salud (dependiente de la Dirección Provincial de Salud Mental) y el segundo por el Equipo Interdisciplinario del Instituto de Recuperación de Mujeres de la Unidad Nº 4 (donde Zajur se encuentra alojada). Si bien la causa estuvo a cargo de la fiscal Cristina Ferraro, su colega de la UFE de Homicidios Gonzalo Iglesias la reemplazó durante la audiencia de procedimiento abreviado.
Brutal golpiza
La tarde del 7 de septiembre de 2018 Jorgito ingresó al Hospital de Niños Orlando Alassia en brazos de su madre. El pequeño, que aún no cumplía los 3 años, había sido brutalmente golpeado e ingresó en paro cardiorespiratorio y sin respuesta neurológica. A pesar de los esfuerzos del personal médico, falleció por la madrugada.
Zajur permanece privada de su libertad desde entonces, luego de que se le imputara inicialmente el "homicidio calificado por el vínculo y por haber sido cometido con alevosía y ensañamiento". Su pareja de entonces, Carlos Alberto Pérez, también fue detenido por el hecho pero no llegó a la audiencia de prisión preventiva. Se suicidó en el Penal de Coronda, apenas unas horas después de haber ingresado.
A lo largo de la investigación se logró determinar qué sucedió esa tarde en el interior de la finca ubicada en calle República de Chile al 4199 de Santo Tomé. Utilizando un cinto, Zajur golpeó repetidas veces a Jorgito mientras lo obligaba a permanecer sentado en una silla. Cuando terminó, fue turno de Pérez, que le asestó golpes de puño y patadas al cuerpito del nene, llegando incluso a golpearle la cabeza contra una pared.
No era la primera golpiza que recibía el niño, pero fue la peor. Sin saber qué hacer, la madre lo llevó al hospital y brindó varias excusas para intentar explicar los severos traumatismos que presentaba su hijo. Pero la violencia desplegada sobre el cuerpo de Jorgito era demasiado evidente.
Violencia de género
En la nueva atribución delictiva a Zajur, en la que se quitaron las agravantes de "alevosía y ensañamiento", se señala que su conducta y la de su pareja tuvo como fin causar la muerte del niño o, al menos, fue emprendida "conociendo, asumiendo y aceptando como posible dicho resultado". Sin embargo "no resultó posible inferir más allá de toda duda razonable que los coautores hubieran elucubrado los pasos tendientes a procurar el estado de indefensión de la víctima", en el caso de la alevosía. Tampoco "que la intención se haya dirigido a tal fin", en cuanto al ensañamiento.
Teniendo en cuenta los informes realizados a pedido del defensor Alejandro Otte, no sólo se suprimieron las agravantes ya mencionadas, sino que también se agregó que el hecho sucedió bajo "circunstancias extraordinarias de atenuación", ya que Zajur también era víctima de su pareja
"Pérez era una persona violenta en el ámbito familiar", y de los escritos surge que la mujer "se encontraba inmersa en un contexto de violencia de género en el que Pérez de manera directa ejercía su poder, afectando a su libertad y ejerciendo violencia tanto física como psicológica".
Estas modificaciones hicieron que Zajur pasara de tener una pena en expectativa de prisión perpetua, a la posibilidad de que ésta fuera de entre 8 y 25 años. Al realizar el abreviado, las partes acordaron que la mujer deberá pasar 16 años en prisión por el homicidio de su hijo. El tribunal admitió el procedimiento, y dará a conocer su resolución dentro del plazo de ley.
La hermanita
Horas después de que Jorgito ingresara al Hospital de Niños, una mujer se acercó al nosocomio junto a la hermana del nene, que tenía tan solo 13 meses. La chiquita tenía casi 40º de fiebre, las manos quemadas y el cuerpo lleno de golpes, igual que el de su hermano. Debió pasar meses internada.
En agosto de 2019 la jueza de Familia N° 5, Mariana Herz, privó de la responsabilidad parental a Zajur y dictaminó que no existían familiares que pudieran hacerse cargo de la tutela de la menor. Así, se la asignó a una familia solidaria.
La niña quedó con secuelas físicas, psíquicas y emocionales del maltrato, pero con el correr del tiempo comenzó a presentar mejoras.
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