El Ministerio de Seguridad de la Nación lanzó una convocatoria pública para dar con el paradero de Juana Inés Morales y Alberto Pedro Kreder, dos vecinos de Comodoro Rivadavia que están desaparecidos desde el 11 de octubre.

La ministra de Seguridad dispuso una recompensa de 5 millones de pesos por cada uno. Ambos fueron vistos por última vez el 11 de octubre rumbo a Camarones.

El Ministerio de Seguridad de la Nación lanzó una convocatoria pública para dar con el paradero de Juana Inés Morales y Alberto Pedro Kreder, dos vecinos de Comodoro Rivadavia que están desaparecidos desde el 11 de octubre.
Como parte de la investigación, el Gobierno nacional ofrece una recompensa millonaria para quienes aporten información útil y verificada que permita avanzar en la búsqueda.
La decisión fue formalizada a través de la Resolución 1373/2025, firmada por la ministra de Seguridad, Alejandra Monteoliva, y publicada en el Boletín Oficial. Allí se detalla que se otorgará una recompensa de 5 millones de pesos por cada persona, destinada a quienes aporten datos relevantes que ayuden a localizar a los desaparecidos.

La investigación está a cargo de la Oficina Fiscal de Comodoro Rivadavia, dependiente del Ministerio Público Fiscal de Chubut, bajo la dirección del fiscal Cristian Adrián Olazabal. Fue ese organismo el que solicitó al Ministerio de Seguridad la apertura del programa de recompensas ante la falta de avances en la causa.
Juana Inés Morales, de 70 años, vivía en el barrio Juan XXIII. Según las características difundidas, tiene contextura robusta, mide 1,60 metro, es de tez trigueña y posee cabello castaño oscuro, ondulado y con flequillo.
Por su parte, Alberto Pedro Kreder, de 79 años, residía en el barrio Ciudadela. Es de contextura delgada, mide 1,75 metro, tiene tez blanca, cabello corto castaño oscuro y ojos verdes.
Ambos fueron vistos por última vez el 11 de octubre, cuando salieron desde el domicilio de Kreder a bordo de una camioneta Toyota Hilux color champagne, dominio NSP-455, con destino a la localidad de Camarones. La última conexión de sus teléfonos celulares se registró a las 9.53 de ese mismo día. Desde entonces, no se sabe nada más de ellos.

El 17 de octubre se produjo el hallazgo que marcó un giro en la causa: la camioneta en la que viajaban apareció abandonada en una zona conocida como Zanjón de Visser, ubicada a 15 kilómetros de la Ruta Nacional 3 y a seis kilómetros de la costa.
El vehículo estaba cerrado y sin ocupantes, pero en su interior se encontraron pertenencias de ambos: documentación, elementos personales y objetos que confirman que habían viajado juntos.
A partir de este dato clave, los investigadores analizan tres hipótesis posibles:
Ninguna de estas líneas está descartada. La zona donde fue hallada la camioneta es extensa, agreste y de difícil acceso, por lo que se realizaron operativos de búsqueda terrestre y aérea, aunque sin resultados positivos hasta ahora.
La resolución del Ministerio sostiene que, debido a la complejidad del caso y a la falta de indicios claros sobre lo sucedido, se considera necesario sumar la colaboración de la ciudadanía para obtener información que permita orientar la investigación.

Quienes tengan información relevante pueden comunicarse con la línea 134, el canal oficial del Programa Nacional de Recompensas. Allí se reciben datos en forma anónima y se garantiza la reserva de identidad de quienes aporten testimonios.
La normativa además aclara que el pago de la recompensa se realizará en el Ministerio de Seguridad o en el lugar que la autoridad designe, una vez que la información aportada sea evaluada y considerada útil por el Ministerio Público Fiscal y los organismos intervinientes.
Todo el procedimiento se realiza bajo protocolos diseñados para resguardar la seguridad y el anonimato del informante.