La ciudad de Comodoro Rivadavia, en Chubut, fue escenario de un nuevo episodio de violencia en el fútbol argentino. Tras la final del Torneo Zonal A de la categoría Reserva Especial, jugadores de Comisión de Actividades Infantiles (CAI) y General Saavedra protagonizaron una batalla campal.
El partido se disputó en el estadio Domingo Perea del club Laprida, donde CAI se impuso por 2 a 0 en la revancha, con goles de Thiago Villalba y Joaquín Mardones. Así, el conjunto dirigido por César Villarroel revirtió la serie (Saavedra había ganado la ida 1-0) y se consagró campeón.
Pelea brutal y videos virales
Lo que era una jornada festiva se transformó en un caos cuando los futbolistas comenzaron a agredirse con golpes de puño, patadas, empujones y gritos. Varios adultos que intentaron intervenir también fueron agredidos. La escena quedó registrada en un video viralizado en redes sociales.
Si bien no hubo heridos de gravedad, testigos denunciaron la ausencia total de policías en el lugar. “No había un policía. Los de CAI pegaron porque les pegaron e insultaban al chico de Colombia”, dijo Sandra, una simpatizante que presenció el hecho.
Acusaciones cruzadas tras la violencia
En redes sociales, usuarios señalaron burlas entre jugadores y supuestos fallos arbitrales que habrían favorecido a CAI como detonantes de la pelea. Según el testimonio de Sandra, algunos simpatizantes de Saavedra arrojaron piedras y botellas desde la tribuna y hasta intentaron agredir al árbitro.
“Se tiraron por los techos del banco para pegarle al árbitro. Se enojaron porque perdieron”, agregó la testigo. Entre los protagonistas mencionados aparece Bairon Ortiz, un juvenil colombiano que integra el plantel de CAI desde 2024 y que también fue agredido verbalmente.
Con el 2-1 global a favor, la CAI se coronó campeona de la Reserva Especial “A”, aunque el festejo quedó totalmente empañado por la violencia que sigue marcando el pulso de algunas canchas del fútbol argentino.