Un dramático episodio ocurrido el martes en la ciudad de Avellaneda (ubicada en el extremo noreste de la provincia de Santa Fe) terminó de manera feliz gracias a la rapidez y pericia de dos mujeres policías del Comando Radioeléctrico local.

La pequeña no tenía signos vitales cuando llegó a sus manos. Le practicaron maniobras de reanimación cardio-pulmonar y la trasladaron al hospital de Reconquista.

Un dramático episodio ocurrido el martes en la ciudad de Avellaneda (ubicada en el extremo noreste de la provincia de Santa Fe) terminó de manera feliz gracias a la rapidez y pericia de dos mujeres policías del Comando Radioeléctrico local.
Según pudo saberse, las uniformadas se toparon con la situación en horas de la mañana, en la intersección de calle 121 y Pasaje 114/116.
Allí las interceptó un remisero que inmediatamente les pidió ayuda. Él trasladaba a una beba que no tenía signos vitales y a sus desesperados padres.
De inmediato, la inspectora Marianela Betig y la suboficial Eliana Chávez subieron a la menor y a su padre, de 25 años, a la unidad móvil e iniciaron maniobras de reanimación cario-pulmonar mientras se dirigían hacia el Hospital Central de Reconquista.
Gracias a la rápida intervención, lograron revivir a la pequeña antes de llegar al centro de salud.
En paralelo, unidades móviles de la Agrupación Cuerpo de Avellaneda y Reconquista colaboraron con cortes de arterias para facilitar el traslado urgente.
Según informaron fuentes médicas, la bebé habría sufrido una broncoaspiración y presentaba un cuadro de broncoespasmo.
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