La oficial ayudante María José San Martín, de 25 años, fue encontrada sana y salva tras estar desaparecida varios días en una zona rural de la provincia del Chubut, en el sur argentino.

La joven oficial había sido reportada como desaparecida tras quedar varada en un camino de arena cerca del lago Colhué Huapi. Fue hallada sana y salva luego de un operativo de búsqueda que mantuvo en vilo a la comunidad y a las autoridades.

La oficial ayudante María José San Martín, de 25 años, fue encontrada sana y salva tras estar desaparecida varios días en una zona rural de la provincia del Chubut, en el sur argentino.
Estaba a unos 500 metros de donde había desaparecido en una zona llamada Río Seco. "Iba camino a la ruta. Lo primero que pidió fue agua. La vio un enfermero y luego fue trasladada al hospital porque esta deshidratada", contó.
La funcionaria detalló que cuando sufrieron el accidente, María José y una compañera llamada Rita subieron a un cerro a buscar señal para pedir ayuda y fueron sorprendidas por una tormenta de viento. Allí se separaron y sólo Rita volvió al auto. La joven policía quedó a la deriva durante cinco días y recién hoy fue encontrada.

San Martín, que presta servicio en la División Policial de Investigaciones de Sarmiento, había sido vista por última vez el viernes 12 de diciembre cuando se dirigía en un automóvil junto con una compañera para cubrir un turno de guardia en un servicio adicional.
El vehículo en el que viajaban, un Renault Logan, quedó encajado en la arena de un camino poco transitado en las cercanías del lago Colhué Huapi, una zona conocida por su terreno inhóspito y la ausencia de cobertura de telefonía celular.
Al no poder avanzar ni comunicarse, las dos mujeres decidieron pasar la noche dentro del auto, con la esperanza de ser auxiliadas. A la mañana siguiente, ante la falta de señal, optaron por caminar en busca de un punto elevado que les permitiera captar señal de celular y pedir ayuda.
La compañera de San Martín logró regresar al vehículo después de separarse en la caminata, pero la oficial no volvió y, tras no encontrarla, regresó hasta un lugar con cobertura para dar aviso a las autoridades.

Esto activó un amplio operativo de búsqueda y rastrillaje tanto de fuerzas de seguridad como de equipos especializados que incluyó perros, drones, motos, cuatriciclos y patrullajes a pie para cubrir la extensa zona de meseta árida.
Según fuentes oficiales del Ministerio Público Fiscal de Chubut, la fiscal Rita Barrionuevo y su equipo dirigieron las medidas investigativas en el sector donde se había reportado el último contacto con la oficial. Las acciones incluyeron también la participación de Bomberos Voluntarios, la Policía Federal Argentina y otros cuerpos de búsqueda, además del apoyo de la comunidad local.
Hasta el momento previo al hallazgo, no se habían encontrado indicios de criminalidad, y la investigación se había mantenido dentro de la calificación “búsqueda de persona”, sin descartar ninguna hipótesis sobre los motivos de la desaparición.