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La fachada de la Escuela Normal en calle Saavedera quedará en la historia. La brecha se profundiza entre los niños que pueden acceder a un teléfono y los que no. Las amplias estructuras edilicias dan la posibilidad de practicar protocolos con niños que no tengan acceso a la Conectividad. Como sociedad debemos aprender a convivir con el virus. Miremos la cercana República Oriental del Uruguay. Foto: Guillermo Di Salvatore

Protesta para que abran las escuelas públicas


1 / 7 La fachada de la Escuela Normal en calle Saavedera quedará en la historia. La brecha se profundiza entre los niños que pueden acceder a un teléfono y los que no. Las amplias estructuras edilicias dan la posibilidad de practicar protocolos con niños que no tengan acceso a la Conectividad. Como sociedad debemos aprender a convivir con el virus. Miremos la cercana República Oriental del Uruguay. Foto: Guillermo Di Salvatore


2 / 7 La fachada de la Escuela Normal en calle Saavedera quedará en la historia. La brecha se profundiza entre los niños que pueden acceder a un teléfono y los que no. Las amplias estructuras edilicias dan la posibilidad de practicar protocolos con niños que no tengan acceso a la Conectividad. Como sociedad debemos aprender a convivir con el virus. Miremos la cercana República Oriental del Uruguay. Foto: Guillermo Di Salvatore


3 / 7 La fachada de la Escuela Normal en calle Saavedera quedará en la historia. La brecha se profundiza entre los niños que pueden acceder a un teléfono y los que no. Las amplias estructuras edilicias dan la posibilidad de practicar protocolos con niños que no tengan acceso a la Conectividad. Como sociedad debemos aprender a convivir con el virus. Miremos la cercana República Oriental del Uruguay. Foto: Guillermo Di Salvatore


4 / 7 La fachada de la Escuela Normal en calle Saavedera quedará en la historia. La brecha se profundiza entre los niños que pueden acceder a un teléfono y los que no. Las amplias estructuras edilicias dan la posibilidad de practicar protocolos con niños que no tengan acceso a la Conectividad. Como sociedad debemos aprender a convivir con el virus. Miremos la cercana República Oriental del Uruguay. Foto: Guillermo Di Salvatore


5 / 7 La fachada de la Escuela Normal en calle Saavedera quedará en la historia. La brecha se profundiza entre los niños que pueden acceder a un teléfono y los que no. Las amplias estructuras edilicias dan la posibilidad de practicar protocolos con niños que no tengan acceso a la Conectividad. Como sociedad debemos aprender a convivir con el virus. Miremos la cercana República Oriental del Uruguay. Foto: Guillermo Di Salvatore


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