Había llegado desde el Monterrey, de México, prácticamente sin rodaje porque no era titular. Es decir, no atajaba. “La realidad es que Alexander Domínguez tiene credenciales de sobra con 30 años: copas, eliminatorias, un Mundial, pero viene de estar mucho tiempo parado en su club”, era la frase más escuchada a mediados de 2017 cuando desembarcaba en Santa Fe. Un año después se lo llevó Vélez a Liniers, poniendo una “fortuna” que era inalcanzable para Colón si es que intentaba retenerlo.
—¿Se te dio todo en Colón? Mejor, imposible “Dida”
—Recuerdo que atajé todos los partidos del campeonato, justo yo que llegaba sin rodaje desde México
—Así es...¡Le “ganaste” al “Flaquito” Conti que jugó 26, es el que te sigue!
—Hermoso grupo, lindos recuerdos
—Es más: te hicieron 22 goles en 27 partidos y tres fueron de penal. Boca, que fue campeón, recibió los mismos goles que vos en Colón. ¿Qué te acordás de tu llegada a Santa Fe?
—Te cuento algo: yo de pequeño siempre, cuando empecé a jugar al fútbol, miraba los clásicos del fútbol argentino: veía por tele un Boca-River desde Ecuador y miraba como se vivía el fútbol acá en Argentina.
—¿Qué te llamaba la atención?
—Todos. Los estadios llenos, el aliento sin parar, el esfuerzo que hace la gente dejando todo para ir a la cancha. Me gustaba ver y seguir el fútbol argentino. Y le pedía a Diosito para jugar en Argentina. Cuando estaba en México, me empezaron a llamar de Argentina. Yo no conocía Santa Fe, tampoco conocía mucho de Colón, pero la ilusión siempre era muy grande. Quería venir acá, de una le dije a mi representante que sí para ir a Colón. No lo dudé nunca y las conversaciones avanzaron hasta que se cerró el tema.
—¿Qué impresión te dejó el club, la ciudad, su gente?
—Desde el primer que llegué me hicieron sentir muy bien: estuve casi un mes viviendo en el Hotel de Campo Colón. Los mozos, gente del hotel y gente allegada al club. El trato hacía mí fue, desde el primer día, excelente. Te dejaban el teléfono y te decían “lo que necesites me llamás”. Encontré gente muy buena en Colón. Siempre lo dije y lo seguiré diciendo: agradecido por el tiempo que estuve.
—Acá también la gente de Colón quedó con una imágen tuya excelente
—Hace poco, antes de todo ésto del coronavirus, fuimos a jugar con Unión y llegamos a Paraná, la gente me pedía fotos y me contaban recuerdos. Tengo mucho cariño de la gente de Colón. Les tengo mucho aprecio. Soy muy feliz de haber pasado por ese club. No puedo hablar mal de nada ni de nadie. Acá en Buenos Aires me cruzo con hinchas de Colón y nos ponemos a hablar. Sigo en contacto con gente de allá.
—¿Qué quisieras decirle al hincha a través de El Litoral?
—Para la gente de Colón, el pueblo sabalero, sólo agradecerle por lo bien que se portaron conmigo, mucho cariño. Feliz y contento de cumplir sueños de atajar en ese club. Sólo les puedo decir gracias de corazón y que Diosito los bendiga.
“Quiero salir campeón de lo que sea”
A los 32 años, además de Liga de Quito, Monterrey de México, Colón y Vélez, Alexander Domínguez se dio grandes gustos: arquero de la Selección de Ecuador en cuatro Copas América (2011, 2015, 2016 y 2019), atajó en dos Eliminatorias (2014 y 2018) y la frutilla del postre fue el Mundial de 2014 para la “Tri”. Entre 2008 y 2010 se dio los gustos de levantar copas: Libertadores, Sudamericana y doblete con la Recopa Sudamericana.
—¿Qué objetivos se te vienen ahora para reinventarte?
—Gracias a Diosito se me fueron cumpliendo las metas. Es una carrera difícil, muy difícil, mucho más en la posición de arquero. Uno siempre trata de renovar objetivos, que sean cortos. Quiero salir campeón de cualquier torneo, en el lugar que esté. Tuve la posibilidad de ser campeón y desde entonces no pude repetir. Me encantaría hacerlo ahora que me hija está a un paso de cumplir 5 años, para poder dedicárselo a ella, que es la persona a la que amo con toda mi alma y todo mi corazón.
—¡Querés la foto con ella!
—Ese sería mi sueño ahora. Le quisiera regalar, ahora que se da cuenta lo que hace el papá, un título de campeón y dar la vuelta olímpica con ella, alzar una copa. Es lo que pienso y quiero. En cualquier lado, con cualquier equipo, cualquier torneo.
“El día que se jugó la final de la Sudamericana entre Colón e Independiente del Valle estábamos entrenando; no vi el partido en vivo sino el resúmen. Me dio mucha pena por la gente, ya que la hinchada sabalera se merece un título” . Alexander Domínguez. Ex arquero de Colón
Ocurrió el 13 de marzo: Alexander Domínguez, arquero de Vélez que es suplente de Lucas Hoyos, había faltado a los últimos dos entrenamientos por tener fiebre. Por entonces, se sospechaba que podría tener la enfermedad del Covid-19, pero por suerte las redes sociales del Fortín indicaron lo contrario. “Alex Domínguez se presentó con fiebre al entrenamiento en el día de ayer. En virtud de las recomendaciones detalladas por el Departamento Médico, se decidió enviarlo a su casa. Actualmente el arquero presenta buena evolución, sin fiebre y bajo monitoreo permanente”, aclaró ese mismo día el Twitter del club de Liniers.