El saldo que dejó una noche en la que el arbitraje le impidió, a Unión, la victoria
Vieron el “toquecito” de Tarragona a Arias en el gol anulado a Gamba y no vieron el empujón desde atrás a Fragapane en el área de enfrente. Unión fue el que más padeció la mala actuación arbitral.
Ferreyra, árbitro del encuentro, en una de las decisiones más cuestionadas . Crédito: Manuel Fabatía.
Fue la famosa “doble vara” en toda su extensión. Bryan Ferreyra, de muy mal arbitraje, perjudicó sin dudas a Unión. El gol que le anuló a instancias del VAR, fue una pelota que Tarragona va a dividir con “Cachila” Arias y el experimentado defensor, cuando el balón lo supera, se tira de manera exagerada y la jugada sigue para que Palacios (de buen partido), meta el pase al medio para la definición de Gamba ante la salida de Zenobio (la figura de Tigre). Después, en el segundo tiempo, hubo una jugada similar en cuanto a que Medina se lo llevó “puesto” a Fragapanemetiéndole un empujón con el hombro sobre su espalda. Acá el VAR no lo llamó a Ferreyra, porque si aquello de Tarragona fue foul, esto, en perjuicio de Fragapane, fue más todavía. Y lo ignoraron. Ferreyra y el VAR. Por consiguiente, un claro perjuicio para Unión.
Dos jugadas muy puntuales en medio de un partido caliente, con un árbitro desbordado y al que le tomaron rápidamente el pulso los jugadores, permisivo con un Tigre que en el primer tiempo se dedicó a hacer tiempo, a poner el partido en el freezer demorando en cada reinicio del partido, con jugadores que se tiraron permanentemente al suelo sabiendo que, impartiendo justicia, había un árbitro sin autoridad.
Con ese panorama, más que nunca los detalles pudieron definir el partido a favor de uno. En este caso, para un Unión que se vio perjudicado por Ferreyra y también por las decisiones que Darío Herrera, en el VAR, tomaba desde Ezeiza. Porque él vio la supuesta falta de Tarragona o entendió que ese contacto ínfimo era pasible de sanción para anular el gol en una jugada que continuó con dos jugadores más de Unión que entraron en juego (Palacios y Gamba). Pero no vio el empujón de Medina contra Fragapane para tomar idéntico camino y convocar a Ferreyra para que revisara la jugada.
* * * * *
Ferreyra no solamente dirigió muy mal porque se equivocó dos veces y en contra de Unión en jugadas puntuales dentro del marco de un partido muy cerrado y con escasas situaciones de gol. Sino que dirigió mal porque jamás pudo conducir el partido, aspecto clave en cualquier labor arbitral y que la hizo mal. ¿Colaboraron poco los jugadores?, puede ser. Algo admitió Mauro Pittón luego del partido (uno de los mejores de Unión, aunque mostrando cansancio en el segundo tiempo). Pero ese porcentaje de culpa que se le puede achacar a los jugadores, que, es cierto, flaco apoyo le dieron al novel árbitro, no es un justificativo para la manera en que permitió que Tigre hiciera tiempo, que los jugadores se le arremolinaran, que las discusiones entre ellos se multiplicaran durante todo el partido, que tuviera dos errores clave en contra de Unión, etcétera, etcétera. Y además -y ahora caben esos errores puntuales en el gol anulado y el penal no cobrado – incidiendo en el resultado del partido. Porque era gol de Unión (el de Gamba) y porque era penal para Unión (el alevoso empujón desde atrás a Fragapane que debió ser penado por el juez o al menos ser observado por el VAR para llamarlo y que decidiera). Ya por ese entonces, en el penal a Fragapane, el arbitraje era muy malo, conflictivo y amenazaba con empeorar. Quizás la “solución” era cometer la “injusticia” de no cobrarlo para que termine de la manera más “diplomática” posible. Salomónico y lamentable.
Zenobio, arquero y figura de Tigre, asiste a Fragapane luego de una infracción que Ferreyra decidió no sancionar. Crédito: Manuel Fabatía.
* * * * *
Madelón no quiso meterse en problemas porque es difícil hablar de los árbitros en este momento, sobre todo luego de lo que le pasó a Lautaro Acosta, el jugador de Lanús. Quizás no tuvo tiempo suficiente de volver a ver las jugadas en el vestuario, antes de enfrentar a la prensa. Deslizó en sus declaraciones que pudo ser penal a Fragapane (lo fue) y que el árbitro dejó que Tigre hiciera tiempo, sobre todo en el primer tiempo. Por este “bozal” que parece imponerse, es entendible que no se quieran meter en problemas, pero es de esperar que Beligoy y compañía, que por los visto le tienen mucha confianza a Bryan Ferreyra para tirarlo a la cancha a dirigir Primera División, observen y revisen lo que pasó en la cancha de Unión.
* * * * *
Hablando de Madelón, dejó en claro que la última incorporación que hizo para su plantel profesional fue la de Solari. Y habrá que ver lo que ocurra con Palavecino. Pero los otros cuatro que se sumaron en el último día del libro de pases (el arquero Gomes Gerth, el defensor Enzo Rubio, el delantero Alan Sosa y el media punta Ricardo Solbes), llegan para sumarse a la reserva. Y también dejó en claro que le falta un “5”. Y que luego del desplante de Saravia cuando se fue a Belgrano teniendo todo arreglado con Unión, la idea era repatriar a Jalil Elías, pero “ninguno de los dos quisieron venir”. ¿Rolón?, hay que descartarlo también, porque está esperando algo de afuera por más que quedó libre de Boca. Le quedan dos cupos, que son los que dejan Verde (para cumplir su función llegó Palavecino) y Francisco Pumpido. Esos dos lugares pueden ser ocupados por Unión hasta el 31 de agosto y no quedan dudas que no se ha retirado del mercado de pases. Los siete jugadores que se sumaron al plantel profesional (Durso, Emiliano Alvarez, Fernando Díaz, Alex Maizon Rodríguez, Tarragona, Solari y Palavecino) y los cinco que fueron a la reserva (a los cuatro mencionados más arriba hay que sumar a Arzamendia, el central que vino de Sarmiento de Resistencia) no son el final de la gestión. Entre líneas, Madelón dijo que le está faltando, al menos, un volante central. En la Bombonera había referenciado a Profini y Giaccone, que no dejan de ser alternativas. Pero su pretensión parece ir más allá de estos dos nombres.
Madelón, en un partido cargado de tensión. Crédito: Manuel Fabatía.
* * * * *
Diego Dabove no ahorró elogios a la propuesta de Unión, aunque reconoció que el empate estuvo bien. Son sensaciones, percepciones. Es cierto que Tigre tuvo lo suyo, sobre todo en la generación de situaciones (un mano a mano tapado por Tagliamonte a Saralegui en el primer tiempo y un tiro en el palo de Sosa en el complemento fueron las más importantes). Pero el balance fue favorable a Unión, sobre todo por lo que hizo en el primer tiempo. Y fundamentalmente por el arranque y el final de la etapa, al punto tal que Zenobio terminó siendo la figura de la visita. “Fue un partido durísimo y así esperamos que lo fuera. Lo que vimos de Unión fue muy bueno ante Estudiantes y Boca, así que esperábamos un partido de las características que se dio. En el segundo tiempo empezamos a jugar un poquito más y controlamos el partido. En general el empate está bien y ninguno de los dos terminamos de controlarnos. Sacamos un punto en una cancha que será difícil para cualquiera y con un equipo que venía con muy buena sintonía”, fue lo primero que dijo Dabove cuando habló en el 15 de Abril, luego del partido y antes que lo haga Madelón, de quien dijo que “más allá del hombre de más que tuvimos en el final, yo sabía que iba a ser difícil aprovecharlo. Aparte, Leo Madelón lo acomodó enseguida al equipo en esos diez minutos finales y nos impidió que aprovechemos el hecho de jugar once contra diez”.
* * * * *
El único momento que Dabove reconoció la superioridad de Unión, fue en el arranque del partido. “En el primero fue más Unión, a nosotros nos costó en el comienzo, pero luego fue parejo y disputado, con mucho orden defensivo de los dos y con mucha intensidad. Llevarse un punto de acá es valorable. A mí me tocó perder en esta cancha un montón de veces. Hubo un gran mérito de Unión, es un equipo que se posiciona bien en la cancha, es un buen momento de Juli Palacios, complican mucho Tarragona y Gamba, pero con un gran esfuerzo pudimos estar siempre en partido. Soto entró en un momento difícil del partido porque Unión atacaba bastante por izquierda, pero cumplió. Es un jugador de selección y tiene jerarquía”, señaló el técnico de este Tigre al que lo hizo duro y lo está metiendo en clasificación para Sudamericana.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.