Un gol ilegitimo, el conseguido por Diego Galván, le permitió hoy a Arsenal de Sarandí derrotar a Gimnasia y Esgrima La Plata por 1-0, en un partido pobre, que rápidamente pasará al olvido.
El gol que definió el partido nació a los 39 minutos del complemento, con un saque lateral, lanzado desde la derecha. El balón cayó en el corazón del área, el defensor paraguayo de Gimnasia Rubén Maldonado rechazó mal y la pelota fue hacia Galván, quien la bajó con su brazo izquierdo, para sacar un remate preciso de derecha, que la mandó al fondo del arco.
En líneas generales se podrá decir que el partido fue sumamente mediocre, ya que ambos equipo carecieron de jugadores que pudieran marcar la diferencia y apenas si se contabilizaron cuatro situaciones de gol (dos para Arsenal y dos para Gimnasia) a lo largo de su desarrollo.
Fue menos malo el primer tiempo. Arsenal dominó hasta los 25 minutos y en ese lapso dispuso de dos situaciones: un centro de Sergio Sena que Mauro Matos no logró empujar al gol, y un remate de Franco Jara que se estrelló contra el travesaño. Del minuto 26 en adelante fue todo de Gimnasia.
Pero lo del Lobo fue todo vértigo y centros, que generalmente fueron rechazados por los defensores locales. En el complemento reinó más la confusión, ambos equipos se alternaron en el dominio de la pelota y Gimnasia dispuso de sus oportunidades para marcar.
En la primera Lucas Castro definió mal ante la salida de Cristian Campestrini, y en la segunda, cuando el partido estaba 1-0, Maldonado fue el encargado de tirarla afuera.
El partido se encaminaba decididamente al empate, pero la avivada de Galván, la que pasó desapercibida sólo para el árbitro Patricio Loustau y a uno de sus colaboradores, le permitió a Arsenal quedarse con una victoria por la que había hecho muy poco.
Fuente: DyN
Fútbol de Primera
Arsenal se llevó los tres puntos en la mano de Galván
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