Si en la fecha de los clásicos se hubiera inaugurado el VAR (video de asistencia al referee), seguramente al misionero Néstor Pitana lo hubieran llamado un par de veces para pedirle que "revise" sus fallos. En el combo de sus decisiones, el ex árbitro internacional para la AFA pero vigente para Conmebol, fue mucho más lo que se equivocó que lo que acertó. En ese combo, se "comió" dos penales (uno por cada lado), ignoró lo que era expulsión para un jugador de Unión (Leo Ramos) y sólo acertó en la del final, cuando "Wanchope" se tiró a la pileta ante otra determinante intervención de Mele con los pies.
Un dato de color que pocos vieron del misionero en el Cementerio de los Elefantes: hubo señales que pudo haber sido uno de sus últimos partidos como profesional. O quizás, directamente, el último de una brillante carrera como colegiado. Es que el juez, siempre tan reservado, pidió ser acompañado en este Colón-Unión por su esposa, su madre y su dos hijos, algo que nunca estila.
Tenés que leerColón chocó con Mele y el empate le sonrió a UniónIncluso, al momento de compartir ese típico instante de camaradería con dirigentes de ambos clubes en su propio vestuario, les agradeció "por el respeto con el que siempre me trataron en Santa Fe". Finalmente, cuando una de esas personas de confianza le pidió como regalo la camiseta amarilla, Néstor Pitana le respondió: "No puedo, esta camiseta me la dejo de recuerdo".
Nacido hace 46 años, el misionero se dio el lujo de dirigir la apertura y la gran final del Mundial de Rusia 2018, con el capítulo decisivo entre Francia y Croacia. Antes, había estado en Brasil 2014. En los últimos meses pareció "caer en desgracia" para la opinión de Claudio "Chiqui" Tapia: el presidente de la AFA lo sacó de la lista de jueces internacionales de Argentina. Sin embargo, la Conmebol lo mantuvo en ese ranking en el inicio de este 2022.
Tenés que leerAsí quedó el historial tras el empate entre Colón y UniónAhora, luego de un arbitraje flojito en este Colón-Unión, varios se fueron de los vestuarios en el Cementerio de los Elefantes con la sensación que el clásico ciudadano en Santa Fe pudo ser el punto final para Néstor Pitana, dueño de una trayectoria de las más sobresalientes en el arbitraje argentino en toda su historia.