El “Turco” Mohamed fue vendido de Huracán a la Fiorentina de Italia en 1.200.000 dólares en su momento y los italianos lo cedieron a préstamo a Boca Juniors. El “Turco”, fanático de Huracán y para muchos el ídolo que comparte la marquesina con el “Loco” Housemann, debió enfrentar al club de sus amores con la camiseta de Boca. Entonces, una prueba indiscutible de ese loco fanatismo sucedió el día que Huracán enfrentaba a Boca, su club en aquel entonces.
En plena Bombonera, el “Turco” Mohamed recibió la pelota en el punto del penal sobre el arco que estaban los hinchas del “Globo”, con el arquero desparramado y dos defensores en la línea, levantó la cabeza y si le pegaba obviamente era gol... pero prefirió enganchar para un lado hasta que le sacaron la pelota.
Su decisión le costaría cara, ya que a los 30 minutos del primer tiempo fue reemplazado y luego Boca decidiría venderlo, pero él prefirió hacer eso antes que meterle un gol al equipo de sus amores. “Quedé dentro del área para rematar y no lo hice. Opté por cederle la pelota a Diego Latorre que venía atrás de mí. A partir de ese momento, la gente de Boca nunca me perdonó porque dicen que fallé a propósito. Así son las situaciones del fútbol y lo lamento”, comentó.
La otra prueba de su amor por el club fue ofrecerse para volver a jugar en Huracán gratis, no le interesaba la plata, él sólo quería ayudar al “Globo” en uno de sus peores momentos. Pero los dirigentes de turno y el técnico Carlos Babington rechazaron esa posibilidad, algo que concretó finalmente como entrenador.
Mano a mano con Mohamed
El gol que no quiso hacer
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