"No dejar de educar", compromiso del IES frente a la interrupción de clases
La institución adaptó sus plataformas online para iniciar el calendario académico. Su rector, Juan Manuel Cozzi, explicó cómo están haciendo frente a la atípica situación desatada por el coronavirus.
Flavio Raina / Archivo Esperanzado. Si todo sale bien, puede surgir una perspectiva renovada de todo el sistema educativo , pronosticó Cozzi.
A partir del aislamiento social al que obligó el avance del Covid-19, se desarrollaron de forma acelerada muchas contribuciones relacionadas con actividades a distancia. En el ámbito educativo, muchos colegios y universidades aprovechan esta coyuntura para poner en marcha nuevas plataformas a través de canales digitales. Este es el caso del Instituto de Estudios Superiores de Santa Fe (IES) que dispuso continuar las clases a través de entornos virtuales en tanto dure la cuarentena. Así lo comunicó el rector de la Institución, Juan Manuel Cozzi, en diálogo con El Litoral: “La experiencia ha sido muy auspiciosa, de acompañamiento mutuo. Tenemos que dar mucho al alumno, para que no se desaliente, y también estar muy atento al cuerpo docente, proporcionando la mayor cantidad posible de recursos, para animarse a este nuevo desafío”.
Mientras se aguardan las directivas oficiales que nacen del día a día las directivas gubernamentales, en el IES planean las actividades desde la reflexión. “Los educadores tenemos un gran compromiso en este momento. Más allá de la incertidumbre, debemos tratar de tener paciencia y ser claros. Es un proceso que estamos viendo todos, propiciamos la comprensión, la empatía y el no tener vergüenza para pedir ayuda”, sostuvo Cozzi.
—De acuerdo a las herramientas disponibles, ¿cuál es el funcionamiento hoy por hoy en las clases del IES?
—Nuestra institución cuenta con una plataforma de código abierto “probado y chequeado” a nivel mundial que es el Moodle con el cual generamos el espacio de Aula Virtual. En este entorno, los alumnos se matriculan a las distintas materias y espacios curriculares, los docentes suben el contenido de la clase para que los usuarios matriculados a la materia lo puedan ver o descargar. Se habilitan foros de debate, trabajos prácticos con día y hora específicos de realización y se reprogramaron mesas de exámenes mediante un sistema de entrega con tiempo límite y evaluación por jurado.
Además, contamos con toda la tecnología de G Suite de Google de servicios exclusivos para educación, disponible para todos los niveles educativos. Entre muchas opciones, nos permitió ser pioneros en la región en contar con este sistema que hoy en día nos posibilita generar clases virtuales compartiendo pantalla, por audio o sólo escribiendo; grabar cada clase y tenerla a disposición por 24 horas; recordatorios y links directos; espacio en la nube privado de 100gb por usuario; disponer del Canal de YouTube para que todos los docentes puedan subir las clases; y tomar exámenes orales con jurado y alumnos conectados de forma remota y que queda en los registros de nuestros sistemas.
Reflexión contra la incertidumbre
-¿Qué tipo de educación surge en este escenario de pandemia?
-Es un tiempo de reflexión sobre lo que tenemos y sobre lo que va a venir. Hoy nos toca desarrollarnos en esto y los protagonistas somos todos: autoridades, docentes y alumnos. Tenemos que repensar tiempos, diseños y de aprender a usar nuevos recursos. Debemos ser claros en las consignas, que puedan fácilmente comprenderse, de manera de favorecer el intercambio entre docente-alumno y contribuir a una fluida relación, de ida y vuelta constante.
Nosotros teníamos desarrollada una plataforma educativa como soporte de la educación presencial y tuvimos que ajustar todo. La urgencia ha hecho que aquellos docentes que por diferentes motivos no habían tomado la impronta de las TICs aplicadas a la educación empiecen a perderle el miedo, utilizando diferentes recursos que le proporciona la educación virtual.
A su vez, hay que considerar la exposición de los alumnos frente a estas actividades, para que se de un desarrollo lógico del proceso de enseñanza-aprendizaje, donde debe haber momentos tanto para aprender como para el esparcimiento y la reflexión.
Creo que es un momento para estar mejorar las articulaciones entre diferentes niveles de enseñanza y entre sector público y privado. Si todo sale bien, puede surgir una perspectiva renovada de todo el sistema educativo.
-Ante los cambios obligados, ¿prevalece un tiempo de oportunidad o de dificultad?
-Hay que ponerse por encima de las antinomias. Emerge un contexto de cooperación, donde se socializan aciertos y errores. Somos conscientes que la educación a distancia no reemplaza a la presencial -a la cual deberemos volver una vez pasada la emergencia- sino que nos posibilita experimentar otras alternativas y caminos. Por supuesto que todo esto no sería posible sin una comunidad educativa comprometida, responsable socialmente, sobre todo en el momento que estamos atravesando.
Dadas las circunstancias, se debe pensar y proyectar un programa extendido en el tiempo. De todos modos, no se necesita “tapar” de tareas y actividades a los alumnos, sino de dosificar, de seleccionar los contenidos en base a cómo se los va a utilizar en cada situación. Para eso también se cuenta con los recursos y herramientas que ponen a disposición los ministerios de educación de la provincia y nación.
Que nadie se quede afuera
La complicación en lo económico atañe a todos los sectores, afectando a la situación de forma transversal y alcanzando a todos sus integrantes. Consultado sobre cómo afrentan esta realidad desde el IES, Cozzi manifestó que “el objetivo central por el que trabajamos es que nadie se sienta perjudicado más allá de la situación que estamos viviendo, que ya bastante nos impone”.
Respecto de las acciones que han llevado adelante para alivianar la incertidumbre, el rector dijo: “Si bien es temprano para hacer una evaluación, contamos con algunas ventajas para este momento. Por ejemplo, muchos de nuestros sistemas de pagos estaban ya bancarizados, lo que nos permitió acelerar los procedimientos. Además, no hemos modificado el valor de la cuota y ampliamos el beneficio aplicado para aquel que paga del 1 al 10”.
Asimismo, advirtió que desde lo institucional también se ven implicados: “El desarrollo de las nuevas plataformas en este tiempo nos ha obligado a contratar servidores con mayor capacidad para evitar los colapsos de conectividad y licencias para su funcionamiento. Esto genera cierta inversión, que es más que necesaria, al igual que lo es dotar de libros una biblioteca”.
De todos modos, expresó que “la idea es que nadie quede fuera del sistema educativo”. “Somos muy respetuosos de cada cuestión en particular en este momento, por eso hemos abierto canales de diálogo permanente, para que los que tienen algún tipo de inconveniente lo puedan plantear y veamos de qué manera se puede resolver”.