Rechazaron la excarcelación del expresidente de Corea del Sur
El Tribunal del Distrito Central de Seúl desestimó la solicitud de liberación de Yoon Suk-yeol, acusado de liderar un intento de insurrección y abuso de poder. La investigación continúa bajo la conducción de un fiscal especial.
El expresidente surcoreano derrocado Yoon Suk Yeol. Crédito: REUTERS.
El expresidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, continuará bajo custodia luego de que el Tribunal del Distrito Central de Seúl desestimara este viernes su pedido de liberación. La resolución se tomó tras una audiencia en la que se evaluó la legalidad del arresto, según informaron medios locales.
La medida mantiene al exjefe de Estado en prisión preventiva mientras avanza la investigación sobre su intento fallido de instaurar la ley marcial en diciembre pasado, hecho que derivó en su destitución.
Yoon fue arrestado por primera vez el 15 de enero en la oficina presidencial. Diez días después, fue acusado formalmente por el fiscal especial Cho Eun-suk como presunto líder de una insurrección. Entre los cargos figuran obstrucción a la justicia, abuso de poder y falsificación de documentos oficiales.
El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, llega a su juicio político. Crédito: REUTERS.
Aunque en una instancia anterior el tribunal había rechazado una orden de detención temporal por 48 horas, el pasado 5 de julio finalmente autorizó una medida cautelar más extensa, permitiendo mantenerlo privado de libertad durante al menos 20 días.
El equipo de fiscales especiales, que comenzó su trabajo el 18 de junio, argumenta que la gravedad de los delitos y la posible obstrucción a la investigación justifican su permanencia bajo custodia.
Oficialmente destituido
El 4 de abril, el Tribunal Constitucional avaló la moción de destitución contra Yoon, dejándolo oficialmente fuera del cargo. La decisión se basó en su fallida maniobra para imponer la ley marcial como respuesta a las crecientes tensiones políticas internas.
Yoon Suk Yeol, asiste a la cuarta audiencia de su juicio político. Crédito: REUTERS.
Tras un breve período en libertad —entre el 8 de marzo y el 5 de julio— el exmandatario volvió a ser detenido, en esta ocasión por una causa que podría tener consecuencias penales de largo alcance.
El caso continúa generando repercusión nacional e internacional, tanto por la figura involucrada como por la profundidad de las acusaciones en un contexto político sensible para Corea del Sur.
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