Todos están entre la espada y la pared. Luego de casi un año y medio de guerra, el gobierno de Israel ha tomado la decisión, excepto que aparezca un acontecimiento fuera de la normalidad bélica, de seguir con la acción militar, con nuevas tácticas.


Todos están entre la espada y la pared. Luego de casi un año y medio de guerra, el gobierno de Israel ha tomado la decisión, excepto que aparezca un acontecimiento fuera de la normalidad bélica, de seguir con la acción militar, con nuevas tácticas.
A estas ya las he mencionado anteriormente pero para esclarecerles la situación a los que no están suficientemente informados consiste en dividir en partes el enclave de Gaza para poder defender y asistir a la población civil, actuando en las zonas desocupadas en contra del grupo Hamás.
Ningún ejército del mundo a protegido y asistido a la población civil como lo hace hoy Israel. A pesar de todo lo referido, escudados en los secuestrados vivos y muertos y en la población civil, el Hamás sigue en su "guerra santa" y continúa activo en la franja.
Por eso deseo transmitir que todo el país se debate en posiciones encontradas respecto a qué caminos debe tomar el gobierno, aunque haya un Gabinete de Guerra de emergencia que decide las acciones a seguir.
Hay familiares de secuestrados que dicen que hay que detener la guerra y acordar con Hamás (lo que significa que hay que conceder todo lo que ellos piden), mientras hay familiares de secuestrados que sostienen lo opuesto. De la misma forma ex dirigentes y militares emiten sus opiniones de forma opuesta.
En dicho contexto, todos sufren: los secuestrados, los familiares de los vivos y muertos; los que fueron liberados y sus familias; el gobierno y el país entero.
Hamás, mientras tanto, emite de vez en cuando algún video con producciones en donde obliga a hablar a los secuestrados con libretos muy precisos, con los que pretenden influir en la opinión pública Israelí. Penoso pero real, de la más baja caladura moral (en realidad, de una moral inexistente).
Benjamín Netanyahu debe su gobierno a la coalición que su partido realizó con los partidos religiosos, desde allí la posición que priva es la de continuar la guerra hasta la derrota final del Hamás. A primera vista, la vida de los 21 secuestrados que quedan con vida peligra más que si se detendría la guerra.
Otras miradas expresan que dentro de lo que se "cree" saber de las exigencias de Hamás, estas son:
1) Detencion de la guerra y las acciones militares contra Hamás por cinco años;
2) Desocupación absoluta de la Franja de Gaza (es decir fin de la ocupación militar israelí);
3) Liberacion de miles de terroristas encarcelados con condenas perpetuas o en proceso (cantidad desconocida por el público);
4) Asistencia humanitaria y aportes económicos para la reconstrucción;
5) El Hamás seguiría en el poder y no entregarían las armas.
Esta es una lista incompleta ya que hay muchas cuestiones no publicadas como por ejemplo posibilidad de retorno de terroristas expulsados en el tiempo o el regreso de aquellos que hayan emigrado con motivo de los múltiples eventos bélicos a través de los años.
Lo concreto es que el Gabinete de Guerra decide las acciones a realizar y se desconoce hasta qué punto la presión "pro arreglo incondicional" extra gubernamental condiciona las decisiones.
Hoy existe un cerco militar sobre Gaza y actúan muchas divisiones sobre el terreno; la aviación y la marina operan cuando es necesario; el Hamás sigue activo y la población ha sido desplazada sucesivas veces dentro de la franja.
Hay grupos religiosos que sostienen que hay que desalojar Gaza de la población árabe y se han instalado en el límite diciendo que tienen la intención de ingresar cuando el gobierno se los permita. Son acciones sectoriales y no existe ningún tipo de orden oficial para realizarlo.
Mi opinión es que "salga pato o gallareta", los resultados no serán satisfactorios para los sectores enfrentados hoy en día. Como se dice en el llano "en la guerra, no hay ganadores, todos pierden", pero claramente se puede ver un ganador y ese es el que persigue la paz, en este caso no hay dudas que en esta contienda Israel tiene ya todos los laureles.
(*) Santafesino radicado en Israel desde 2002.
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