El Vaticano se convirtió este sábado en escenario de una reunión inédita que reunió al papa León XIV con algunas de las personalidades más reconocidas del cine internacional. Cate Blanchett, Viggo Mortensen, Spike Lee, Monica Bellucci, George Miller, Gaspar Noé, Emir Kusturica, Laura Citarella, Dario Argento y Matteo Garrone formaron parte de la comitiva que asistió a la audiencia especial
En el Vaticano
León XIV encabezó un encuentro con figuras emblemáticas de Hollywood
La jornada reunió a referentes del séptimo arte que mantuvieron un diálogo reservado con el máximo representante de la Iglesia, en medio de especulaciones sobre futuros proyectos.
Durante el encuentro, convocado para reflexionar sobre el presente y el futuro del séptimo arte, el pontífice expresó su preocupación por el retroceso de las salas y destacó el rol cultural que, según él, el cine no puede perder.
Nombres de peso
Desde los primeros minutos, el protagonismo de la jornada estuvo puesto en los artistas que ocuparon las primeras filas de la Sala Clementina. Cate Blanchett escuchó con atención las palabras del papa, mientras que Spike Lee —fiel a su estilo— aportó gestos de entusiasmo ante cada mención al valor del cine como puente social.
A pocos metros, Viggo Mortensen participó del diálogo con especial interés por el vínculo entre creatividad y espiritualidad, mientras que Monica Bellucci se mostró visiblemente emocionada al saludar al pontífice. También dijeron presente figuras como George Miller, responsable de clásicos del cine contemporáneo, y el argentino Gaspar Noé, representante de una mirada audaz y experimental.
Emir Kusturica, Dario Argento, Matteo Garrone y la argentina Laura Citarella completaron un grupo que dio al encuentro un peso artístico sin precedentes para una audiencia papal.
Valor cultural
León XIV dedicó buena parte de su discurso a remarcar que la experiencia cinematográfica está atravesando un momento crítico. Ante Blanchett, Mortensen y los demás artistas, pidió que las instituciones culturales trabajen para evitar que los cines desaparezcan de las ciudades.
Para el pontífice, la pérdida de estos espacios afecta directamente la forma en que las comunidades viven el arte y construyen vínculos. Señaló que los cines y teatros actúan como “corazones culturales” y que, sin ellos, la vida urbana pierde una parte esencial de su identidad.
Resaltó además que actores, directores y guionistas —como los presentes en la audiencia— cumplen un papel fundamental al narrar las heridas del mundo sin caer en el sensacionalismo. En esa línea, mencionó que la violencia, el exilio, la pobreza y la soledad necesitan miradas sensibles capaces de acompañar y no explotar el dolor humano.
Intercambios, regalos y una emotiva despedida
La audiencia también estuvo atravesada por momentos personales entre el papa y los artistas. Spike Lee sorprendió a todos cuando obsequió al pontífice una camiseta de los Phoenix Suns con el número 14 y la inscripción “Papa Leo”, gesto que generó sonrisas entre los presentes.
Cate Blanchett, al finalizar el evento, señaló que el mensaje del pontífice había sido “profundamente necesario”, especialmente en tiempos donde la cultura parece desplazada por la lógica del algoritmo. Monica Bellucci, por su parte, protagonizó uno de los momentos más emotivos al fundirse en un cálido saludo con León XIV.
Matteo Garrone, Emir Kusturica y Laura Citarella recorrieron luego los pasillos del Palacio Apostólico, comentando la importancia del encuentro para impulsar un diálogo entre arte, espiritualidad y responsabilidad social.
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