“Cambalache”, un desfile que hiló identidades, futuro y naturaleza en la Estación Belgrano
En una pasarela que unió tradición y creatividad, los estudiantes mostraron sus trabajos frente a una multitud. La enorme respuesta del público ratificó el crecimiento de la ciudad como escenario de la moda.
La Estación Belgrano repleta a la espera del desfile. Crédito: Manuel Fabatía.
En una Estación Belgrano colmada, se presentó este miércoles 26 “Cambalache, Entramando Tradiciones”, el desfile anual de Diseño de Indumentaria que reunió a más de 150 estudiantes en una puesta monumental. Familias con flores, amigos, influencers, docentes y amantes de la moda ocuparon cada uno de los tres pasillos de la extensa pasarela, en una jornada calurosa que no impidió que el público celebrara cada pasada.
El evento propuso un recorrido conceptual por tres mundos: la identidad argentina, los imaginarios del futuro y la biomimética, atravesando arte, territorio, ciencia y cultura popular. Desde leyendas rurales hasta proyecciones hacia el año 2355; desde danzas y oficios tradicionales hasta la geometría inspirada en hongos, aves o glaciares, el desfile construyó un relato coral que buscó mostrar una Argentina diversa, viva y en transformación.
En el marco de la IES Week 2025 los estudiantes presentaron colecciones que fusionan culturas, memorias y estilos en una pasarela que crece año tras año.
La primera parte protagonizada por las creaciones de los alumnos de tercer año estuvo dedicada a “Identidad en Movimiento”, un manifiesto visual donde las prendas dialogaron con paisajes, migraciones, lenguajes artísticos (muralismo, fileteado, cerámica, telar) y mitologías locales. En escena, el vestuario convirtió al cuerpo en territorio y a la moda en relato.
A su turno, los estudiantes de segundo presentaron “Imaginarios del Futuro – Argentina 2355”, invitó a pensar cómo podría vestirse un país dentro de más de tres siglos. Estudiantes de segundo año imaginaron tecnologías, climas y modos de habitar un mundo en transformación, con diseños que combinaban funcionalidad, estética y especulación creativa.
Finalmente, primer año presentó “Biomimética”, un homenaje a la naturaleza como maestra. Hongos que inspiran texturas, aves que sugieren movimiento, fósiles que devienen estructura y especies de la fauna y flora argentina reinterpretadas en telas, volúmenes y siluetas.
El evento propuso un recorrido conceptual por la identidad argentina.
Un evento muy convocante
Para Lucila Testi, directora de la carrera de Diseño y Producción de Indumentaria del IES, la enorme presencia de público no fue una sorpresa. “Sí, era lo esperable. Es un evento muy convocante. Pensá que son alrededor de 150 alumnos, cada uno trae modelos, familiares, amigos. Todo eso se multiplica”, explicó minutos antes del inicio.
La organización se trabajó durante todo el ciclo lectivo: “Este desfile se arma a lo largo de todo el año. Muchas materias intervienen y cada edición nos hace crecer; ya tenemos experiencia de otros desfiles y siempre buscamos superarnos”.
Testi destacó además la dimensión pedagógica detrás de la puesta: “Tenemos la materia Producción de Moda y Desfile, donde analizamos pasarelas, locaciones, recursos y dinámica de modelos. Nuestros modelos no son profesionales: son amigos, familiares, padres, hermanos, primos que se prestan, además de algunos modelos reales. Se preparan muchísimo y los diseños están bellísimos”.
Lucila Testi, directora de la carrera de Diseño y Producción de Indumentaria del IES. Crédito: Manuel Fabatía.
Sobre el backstage, Testi relató: “Los alumnos están desde las tres de la tarde preparándose, con este calor. Hicieron fotos, pruebas y ajustes”. A su vez, con emoción, la directora reconoció que cada año implica un desafío nuevo: “Nunca faltan los nervios. Hacer algo en la Belgrano no es fácil, pero tengo un gran equipo docente y de estudiantes. Sin ellos y sin el apoyo del IES sería imposible”.
Más que un desfile, Cambalache fue una muestra del trabajo colaborativo entre docentes, estudiantes y familias. Una celebración de la creatividad local en una puesta que emuló la escala de las grandes semanas de la moda, pero con el sello propio del IES: identidad, compromiso y una mirada profundamente argentina.
El éxito de la convocatoria volvió a demostrar que Santa Fe crece cada vez más dentro del mundo de la moda: el público apuesta, acompaña y se interesa por estos eventos, algo que quedó en evidencia tanto en la imponente producción del IES como en la masiva asistencia santafesina.